Conmemoración cubana


El pueblo cubano festeja este uno de enero el 48 aniversario de su Revolución y no obstante el bloqueo económico norteamericano de que es objeto, sus í­ndices de desarrollo humano son superiores a los de la región y aún le alcanza para apoyar programas de cooperación en materia de salud, educación y deporte para el resto de paí­ses latinoamericanos.

Este uno de enero el pueblo cubano estará conmemorando el 48 aniversario de su Revolución en medio de un bloqueo norteamericano, promovido por el presidente George Bush, que a decir de Rolando Barroso, agregado de prensa de la embajada de Cuba, acreditada en Guatemala, se ha endurecido de tal manera, que la isla ha dejado de percibir millones de dólares en concepto de turismo y de otras actividades de materia económica.

Edwin Ruiz
eruiz@lahora.com.gt

El propósito de la polí­tica del Gobierno de los Estados Unidos con el bloqueo a Cuba, expresa Barroso, ha sido, desde su implantación, imponerle a este pequeño paí­s su voluntad mediante la coerción y la fuerza, a despecho de las normas del derecho internacional y en contra de la voluntad y decisión del pueblo cubano de defender su soberaní­a y el derecho a la autodeterminación.

¿Por qué bloqueo y no embargo?

«Las acciones ejercidas contra Cuba por el Gobierno de los Estados Unidos no se enmarcan en la definición de ’embargo’. Por el contrario, trascienden éste y tipifican un ’bloqueo’ al perseguir el aislamiento, la asfixia, la inmovilidad de Cuba, con el avieso propósito de ahogar a su pueblo y llevarlo a claudicar de su decisión de ser soberano e independiente».

«Â¿Resulta Cuba deudora de los Estados Unidos?, ¿ha cometido Cuba algún delito que autorice el secuestro y liquidación de sus bienes a favor de los Estados Unidos? La respuesta es diáfana y contundente: No. Cuba no ha sido ni es una amenaza para la seguridad de los Estados Unidos».

Múltiples han sido las resoluciones de las Naciones Unidas que condenan los actos de agresión. Como ejemplo, Barroso menciona la Resolución 2625, del 24 de octubre de 1970, del XXV Perí­odo de Sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, que declara la igualdad soberana a los Estados, la libre determinación de los pueblos y la obligación de todo Estado de no intervenir en los asuntos que no sean de su jurisdicción interna.

Esta resolución establece que «ningún Estado puede aplicar o fomentar el uso de medidas económicas, polí­ticas o de cualquier otra í­ndole para coaccionar a otro Estado, a fin de lograr que subordine el ejercicio de sus derechos soberanos y obtener él ventajas de cualquier otro. Todo Estado tiene el derecho inalienable de elegir su sistema polí­tico, económico, social y cultural sin injerencia en ninguna forma de parte de ningún otro Estado».

ONU rechaza bloqueo

Durante 14 años consecutivos, desde 1992, la Asamblea General de las Naciones Unidas ha aprobado con creciente mayorí­a la Resolución titulada: «Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba», pero los Estados Unidos, lejos de acatar la misma, ha promulgado nuevas leyes en sentido contrario, como la Torricelli y Helms Burton, cuyas regulaciones extraterritoriales afectan la soberaní­a de otros estados y los intereses legí­timos de entidades o personas bajo su jurisdicción.

Bloqueo norteamericano en números

El daño económico que ha sufrido el pueblo cubano supera la cifra de US$86,108 millones de dólares. Sólo en el 2005, costó más de US$4 mil millones de dólares. Entre el 2005 y 2006, el bloqueo a Cuba fue recrudecido y se intensificó su efecto extraterritorial, se mantuvieron las restricciones extraterritoriales al comercio, Cuba se mantuvo sin poder recibir turismo norteamericano, explica Barroso.

Las persecuciones a los que visitan Cuba se intensificaron, Cuba, siguió sin poder usar el dólar en sus transacciones internacionales, Cuba no tuvo acceso a los organismos financieros internacionales, se intensificó la aplicación de la ley Torricelli, nueva escalada en la aplicación de la ley Helms Burton, entre otras cosas más, señala.

El 6 de mayo del 2004, el presidente Bush anunció su plan para la anexión de Cuba; este implicaba el recrudecimiento del bloqueo, mayor financiamiento para subversión y campañas de propaganda contra Cuba y si fuera poco, su reconolización. Sin embargo, la población cubana continúa inclaudicable y levanta su voz para poner fin a este bloqueo genocida, concluye Barroso.

SUGIERO RECUADRO

Plan Bush en materia de bloqueo en estos dos últimos años:

a) Mayores restricciones a las visitas familiares de los cubanoamericanos a Cuba (los viajes disminuyeron en un 54% de más de 115 mil en el 2003 a poco menos de 62 mil en el año 2005).

b) Nuevas restricciones a los viajes de los norteamericanos a Cuba (se redujeron en un 45%, de más de 85 mil en el año 2003 a 39 mil en el 2005).

Mayores restricciones al enví­o de remesas y paquetes.

Imposición de sanciones a compañí­as y ciudadanos de Estados Unidos que violen las regulaciones del bloqueo. Entre 2004 y 2005 más de 800 personas fueron multadas por viajar ilegalmente a Cuba y 85 compañí­as fueron sancionadas.

e)Intensificación de la persecución contra las transacciones comerciales y financieras de Cuba en el exterior. Se estableció un Grupo de Identificación de Activos Cubanos para investigar las ví­as por las que entran y salen las divisas de Cuba.

f)Quince empresas con intereses cubanos radicadas en terceros paí­ses han sido sometidas a la aplicación del bloqueo.

Cooperación cubana

En materia de salud, deporte y educación, la cooperación de Cuba en nuestro paí­s es encomiable. Más de tres mil médicos cubanos han pasado por Guatemala en más de ocho años, la ayuda proporcionada a los damnificados durante la tormenta Stan, los cientos de jóvenes guatemaltecos que estudian educación fí­sica y medicina en Cuba y que ya están regresando graduados, los cientos de guatemaltecos que ha recuperado la vista gracias a la labor de la Operación Milagro y su reciente instalación del Centro Oftalmológico en San Cristóbal Verapaz.