Congreso sin aprobar leyes para combate de corrupción


aa_foto3

Al finalizar la sexta legislatura en el Congreso de la República la cual mantiene según el analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asies), Luis Linares, baja calidad de resultados en leyes de beneficio para Guatemala, derivado de la irresponsabilidad y falta de principios de los diputados.

FLOR DE MARIA ORTIZ
fortiz@lahora.com.gt

Hasta el momento se tienen contempladas dentro de las 37 leyes aprobadas, pero aún falta por aprobar leyes que en realidad puedan beneficiar al paí­s en tema financiero como lo son: Ley antievasión II, la eliminación del secreto bancario, ley de enriquecimiento ilí­cito, ley contra el robo de celulares y reforma fiscal.

A lo que Linares, dijo que ha sido un resultado del escaso compromiso de los diputados, “esto es también efecto de la práctica de los legisladores a entorpecer la agenda legislativa con las interpelaciones, enmiendas de curul, de las tácticas dilatorias al momento de los debates en el pleno, con la finalidad de bloquear la emisión de leyes”.

Asimismo, el profesional indicó que estas acciones o tácticas se deben a “chantajes” por diputados que buscan un beneficio a cambio de contratos, obras y otros beneficios, con la finalidad de apoyar las leyes. 

“Estas medidas pueden resultar un medio desesperado para evitar que una ley perjudique a un sector o beneficie a la población, sean bloqueadas por medidas  irresponsables de los diputados. A esto se debe el escaso rendimiento del Congreso al aprobar leyes para los guatemaltecos”.

Sin embargo, Linares aseguró que de continuar el Legislativo con la cantidad de diputados actuales (158), existe aún más “baja calidad” en la aprobación de leyes. Sugiriendo “no deben existir muchos diputados porque no se dan abasto para negociar leyes de apoyo, porque lo que provocan son siempre beneficios propios y baja calidad social”.

El profesional dijo que,  “el Congreso con este escaso rendimiento también pierde credibilidad hacia la población porque el costo es alto de no trabajarse con leyes que en realidad necesita Guatemala”.

TIEMPO PERDIDO

Roberto Alejos, presidente del Legislativo, manifestó que las interpelaciones han sido las causantes que la agenda legislativa no prosperara.

“Los diputados puede hacer las interpelaciones que deseen, pero tiene que ser un tiempo estipulado y mí­nimo, pero muchos utilizan esta medida para obstaculizar la agenda legislativa que se tení­a prevista. Existen muchas leyes de beneficio que se quedaron pendientes por la exageración de tiempo utilizado para las interpelaciones y otros procesos que no benefician”.

Por su parte, la diputada Nineth Montenegro, de Encuentro por Guatemala, la baja productividad en leyes es por las interpelaciones y las medidas dilatorias que han ingresados los diputados.

“Creo que la interpelación que más afectó fue la del ministro de Gobernación, Carlos Menocal, que fue casi  un mes; originó un atraso en la agenda”.

Sin embargo, resalto que durante los primeros tres años de legislatura se pueden avanzar en leyes, “en el último año es un poco difí­cil que puedan trabajarse leyes, pero siempre existe la voluntad para aprobar leyes de beneficio”.

A decir de Manuel Barquí­n, vicepresidente del Congreso, dijo que dentro de la sexta legislatura han existido leyes, pero no han sido suficientes por las acciones de otras bancadas en programar interpelaciones.