Congratulaciones al Premio Nobel de la Paz


Dan Sullivan,

Secretario de Estado Adjunto para Asuntos Económicos y de Negocios, Departamento de Estado de los Estados Unidos

Con el otorgamiento del Premio Nobel de la Paz a Muhammad Yunus y al Banco Grameen, por el Comité Nobel, una vez más recordamos el importante papel que las microempresas pueden desempeñar en el desarrollo económico y en la reducción de la pobreza. En esta era de globalización, enfrentamos el doble reto de generar un desarrollo económico creciente y reducir la pobreza.

Durante mucho tiempo, los Estados Unidos ha apoyado el extraordinario trabajo del doctor Yunus. En 1965, el Departamento de Estado otorgó a un joven economista, doctor Yunus, una beca Fulbright para estudiar economí­a en la Universidad Vanderbilt. El desarrollo de microempresas ha sido un componente importante de la ayuda externa de los Estados Unidos durante más de treinta años. Los Estados Unidos ha apoyado a las micro y pequeñas empresas (MYPES) a través de programas de asistencia que proporcionan acceso a servicios financieros y de negocios; facilitan la participación en los mercados; y permiten que las personas de escasos recursos participen en el desarrollo de los negocios. Los Estados Unidos es el principal donante bilateral para el desarrollo de microempresas, incluyendo los microcréditos, a nivel mundial. El año pasado facilitamos US$ 211 millones para la ayuda a las microempresas. Estos fondos han servido como punto de partida para fondos adicionales por parte de bancos, otras fuentes privadas, e instituciones multilaterales. Por consiguiente, proporcionamos más disponibilidad de recursos a los ciudadanos de más escasos recursos del mundo para que tengan acceso a negocios sólidos.

La Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), la principal agencia civil de ayuda externa del gobierno de los Estados Unidos, proporciona financiamiento para microempresas para más de 3.8 millones de empresarios y hogares en todo el mundo. La USAID facilita esta ayuda de varias maneras: mediante el apoyo a Organizaciones No-Gubernamentales, a redes solidarias de crédito e instituciones financieras. Los proyectos de microcrédito asisten particularmente a mujeres en paí­ses en desarrollo, quienes tradicionalmente han tenido un acceso limitado a fuentes convencionales de financiamiento. Estos proyectos también permiten que las MYPES tomen ventaja de los beneficios de la globalización, por medio de un aumento de las oportunidades para la exportación.

A medida que las MYPES crecen y son integradas a las economí­as formales de sus paí­ses, facilita y transforma las vidas a estas personas en el mundo, tanto mujeres como hombres, y se crean más fuentes de empleo e ingresos más elevados, contribuye al crecimiento económico, y fortalece las sociedades democráticas. Durante la ceremonia de anuncio del premio, el Comité Nobel Noruego afirmó lo siguiente: «Cada persona en el mundo tiene tanto el potencial como el derecho a una vida decorosa. Entre todas las culturas y las civilizaciones, Yunus y el Banco Grameen han demostrado que aún los más pobres entre los pobres pueden trabajar para propiciar su propio desarrollo».

Este Premio Nobel es un reconocimiento al importante papel que desempeña el microfinanciamiento para aliviar la pobreza y facilitar la vida de los ciudadanos. Como el Comité Nobel lo señaló en su anuncio, «la paz duradera no puede ser alcanzada a menos que grandes grupos encuentren maneras para escapar de la pobreza. El microcrédito es uno de estos medios. El desarrollo desde sus raí­ces también sirve para avanzar hacia la democracia y los derechos humanos». Muhammad Yunus y el Banco Grameen han ayudado a crear las condiciones necesarias para impulsar un desarrollo económico y social desde su principio. Nos congratulamos por sus esfuerzos en aliviar la pobreza y promocionar la prosperidad a través del innovador microfinanciamiento, y al mismo tiempo esperamos trabajar en el futuro con el doctor Yunus y la comunidad microfinanciera.