La comunidad internacional no ha cesado de condenar la ofensiva israelí en la Franja de Gaza.
Numerosos países musulmanes de Asia y del resto del mundo proseguían hoy con las condenas a la ofensiva israelí en la Franja de Gaza, que se cobró al menos 320 muertos.
Pakistán, Afganistán, Indonesia y Malasia pidieron «el cese inmediato» de los ataques, destinados según Israel a poner fin a los disparos de cohetes desde la franja de Gaza.
«Pakistán llama insistentemente a la comunidad internacional a promover una solución pacífica, equitativa y duradera a la cuestión palestina», declaró el presidente Asif Ali Zardari, quien tachó los ataques de «contraproducentes» e ilegales según la Carta de la ONU.
El ministerio afgano de Relaciones Exteriores dijo que los bombardeos, que «matan a inocentes», no pueden justificarse «sólo por la política de Hamas», el movimiento islamista que controla la franja de Gaza desde junio de 2007.
Según la ONU, la ofensiva israelí contra Hamas en la franja de Gaza causó desde el sábado al menos 57 muertos civiles, entre ellos 21 niños.
El presidente en ejercicio de la Organización de la Conferencia Islámica, el presidente senegalés Abdulaye Wade, coincidió en que las razones alegadas por Israel para explicar los ataques son «inaceptables». Dichos ataques «no pueden explicarse por los disparos de cohetes de Hamas» contra objetivos israelíes.
Los cohetes lanzados han matado desde el sábado a dos civiles israelíes en localidades cercanas a Gaza.
Indonesia, el país de mayor población musulmana del mundo, denunció un «uso desproporcionado de la fuerza» por parte de Israel y calificó los disparos de cohetes palestinos de «actos de autodefensa» ante «la ocupación militar y la colonización» del Estado hebreo.
Otro país musulmán, Malasia, calificó de «desproporcionada» la acción de Israel. «Malasia lamenta el uso desproporcionado de medios militares por Israel contra la población de Gaza», declaró el primer ministro Abdulá Ahmad Badawi, en un comunicado difundido la noche del domingo.
Malasia, aliado tradicional del pueblo palestino y favorable a la creación de un Estado palestino, no mantiene relaciones diplomáticas con Israel.
Japón por su lado llamó a la calma a Israel y a Hamas.
«Japón llama a las dos partes a dejar de inmediato el uso de la fuerza para evitar que se agrave aún más la violencia», declaró el ministro de Relaciones Exteriores, Hirofumi Nakasone, en un comunicado.
Pekín empleó un tono más firme hacia Israel. China «está impactada y seriamente preocupada por las operaciones militares actuales en Gaza, que han dejado gran número de muertos y heridos», declaró el viceprimer ministro Li Keqiang en un comunicado.
Por su lado, Canadá dijo que el responsable de la escalada es Hamas. «El hecho de que Hamas ataque deliberadamente y de forma constante a civiles (israelíes, ndlr) es el motivo de estos desgraciados acontecimientos», dijo el ministro de Relaciones Exteriores Lawrence Cannon.
Una opinión compartida por la canciller alemana Angela Merkel. Según su portavoz Thomas Steg, Merkel y el primer ministro israelí Ehud Olmert coincidieron en una conversación telefónica el domingo en que «la responsabilidad de la situación en la región corresponde a Hamas de manera clara y exclusiva».
Según el portavoz, la canciller alemana insistió en que «Israel tiene el derecho legítimo de defender su población y su territorio».
El gobierno sudafricano, mientras, convocó al embajador israelí para transmitirle su «profunda inquietud» ante la «brutal agresión» de las fuerzas israelíes en Gaza, indicó este lunes un comunicado de la cancillería sudafricana.
Al mismo tiempo que los dirigentes de distintos países reaccionaban, tuvieron lugar manifestaciones de protesta contra los ataques israelíes en todo el mundo, como por ejemplo este lunes en Teherán, donde se congregaron miles de personas.
El guía supremo de la revolución iraní, el ayatolá Ali Jamenei, que llamó el domingo a los países musulmanes a castigar a Israel por «sus crímenes en Gaza», decretó el lunes jornada de duelo nacional en solidaridad con la población de Gaza.
Israel parece, por el momento, poco impresionado con las críticas internacionales a su ofensiva sobre Gaza y se contenta constatando que en muchos casos se acompañan de condenas a Hamas, por los disparos de cohetes contra el sur isarelí.
Un alto responsable gubernamental estimó que, en general, «el tono de las críticas es moderado, templado, más equilibrado, al menos las de los países que cuentan», dijo en referencia a los países occidentales, particularmente Estados Unidos.
«No habló de Irán o de otros Estados extremistas», agregó este funcionario, bajo anonimato, en una entrevista con la AFP.
Este alto responsable aseguró que tienen en cuenta las opiniones de los demás: «estamos atentos a las críticas, pero eso no nos impide actuar».
En paralelo con la ofensiva sobre Gaza, Israel ha puesto en marcha una campaña de imagen para justificar su postura.
«Esperamos que la comunidad internacional apoye una operación con la que que se pretende cambiar la situación y devolver la calma» a los israelíes que viven al alcance de los proyectiles palestinos disparados desde la franja de Gaza, declaró la ministra de Relaciones Exteriores israelí, Tzipi Livni, durante un recorrido por el sur de Israel con un grupo de embajadores.
«No podemos aceptar que el mundo ponga al mismo nivel a una organización terrorista como Hamas, que se hizo con el control de la franja de Gaza de manera ilegítima, y a un Estado miembro de la ONU» que ejerce su derecho a defenderse, agregó ante unos 60 representantes diplomáticos extranjeros.
Israel bombardea desde el sábado objetivos de Hamas en Gaza, matando a 300 personas, la mayoría miembros del movimiento islamista, pero también civiles (51, según la ONU, entre ellos niños y mujeres).
«El gobierno israelí no debe hacerse ilusiones. Una vez pasen las fiestas (navideñas), las críticas se intensificarán», estimó el analista político Menachem Klein, especialista en Oriente Medio.
«Es verdad que los reproches son hasta ahora moderados y que tanto Hamas como Israel son acusados de dañar a los civiles. Pero aun es posible un atropello (del ejército israelí). Y ahí, el tono hacia Israel cambiará», dijo.
Varios países en Europa y Asia han pedido contención a Israel y que Hamas deje de disparar proyectiles contra Israel.
China, generalmente más hostil, se dijo «conmocionada», sin más.
México, que exigió el cese «inmediato» de los ataques israelíes, condenó «tajantemente el lanzamiento de cohetes a territorio israelí».
Hasta ahora el Consejo de Seguridad de la ONU no ha adoptado ninguna resolución (que sería vinculante), limitándose a difundir un comunicado reclamando «el cese inmediato de toda violencia» y de las «actividades militares», un llamamiento al que se sumó el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
Estados Unidos le pidió a Israel que trate de proteger la vida de civiles, mientras Canadá culpó a Hamas de la escalada de la violencia.