Concurso de modelos minusválidas


Cambio. El mundo de la moda está empezando a revolucionarse, y está volteando a otros sectores que han estado excluidos, como las personas de capacidades especiales. (AFP / La Hora)

Las diez jóvenes que llegaron de varios paí­ses europeos para participar esta semana en Hannover (norte de Alemania) en el primer concurso de modelos minusválidas son hermosas y están motivadas, aunque se desplacen en silla de ruedas.


Luciendo atuendos de calle o largos vestidos de noche de resplandecientes colores, Milena, la macedonia, Gerardina, la italiana, o Inés, la alemana, desfilaron bajo los reflectores ante centenares de entusiastas espectadores y un jurado de profesionales.

El objetivo es ganar renombre en el mundo de la moda, y por qué no, convertirse en modelo de publicidad para las revistas o la televisión.

«Â¡Es posible! Pero queda todaví­a mucho por hacer en la lucha contra los prejuicios, porque la gente no piensa a menudo que la belleza y la condición de minusválido pueden ser compatibles», explica la serbia Jelena Zdravkovic, una hermosa rubia de 23 años.

La joven, estudiante de psicologí­a en Alemania y minusválida por una enfermedad muscular congénita, fue consagrada la noche del lunes como la primer premiada del concurso «Beauties in motion international».

Al son de la música de Madonna o de Prince, las diez candidatas, seleccionadas entre 200 mujeres lisiadas, hicieron girar sus sillas de rueda en una coreografí­a perfectamente orquestada.

«Estas mujeres no quieren que se apiaden de ellas. Son modelos como las otras. Y no cabe duda de que son sexy», observó desde los bancos del jurado la modelo estadounidense Bruce Darnell, muy popular en Alemania por su participación de un programa de casting por televisión titulado «Top models».

Entre las sesiones de maquillaje, las candidatas afirman que la experiencia les resulta muy divertida.

«Me gusta subir a escena y mostrarme en un espectáculo», reconoce la austrí­aca de origen zambio Khelesiya Erdkí¶nig. «Pero no es nada fácil. Tenemos que luchar para mostrar que podemos hacer lo mismo que las personas no minusválidas», agrega esta pequeña mujer, muy dinámica, cantante profesional y lisiada desde los dos años.

En lo que concierne al guardarropa, las originales creaciones de suntuosos drapeados «no tienen nada de particular. Yo podrí­a haber creado estas mismas prendas para mujeres no minusválidas», afirma Mira Kí¶tters, diseñadora de moda e igualmente miembro del jurado.

Para la alemana Nina Wortmann, que participó en un concurso similar en 2004, un año después del accidente que la dejó parapléjica, y es asimismo miembro del jurado, «lo que cuenta en esta profesión es estar motivada, no quedarse tirada en una silla de ruedas y mantener la cabeza en alto».