Investigadores de la Universidad Pompeu Fabra (UPF) han estudiado cómo las personas mayores interactúan y usan el correo electrónico en su vida cotidiana. El estudio se realizó en centros sociales de Barcelona y servirá para diseñar nuevos sistemas de correo electrónico más intuitivos y accesibles.

El correo electrónico o e-mail es la aplicación de internet más utilizada, incluso por las personas mayores, que no han crecido con las tecnologí­as de la información y la comunicación (TIC), y han aprendido con mayor esfuerzo que la gente joven. Sin embargo, los cientí­ficos sociales y tecnólogos todaví­a saben muy poco sobre cómo la gente mayor o de la tercera edad interactúa con los sistemas de correo electrónico en su vida diaria.

«Querí­amos entender las prácticas cotidianas de la gente mayor con el e-mail en términos de accesibilidad, frecuencia, tipo de contenido, relación con otras tecnologí­as y actividades, modelos de comunicación, motivaciones y experiencias interactivas», explica a SINC Sergio Sayago, autor principal del estudio e investigador en la UPF.

La investigación etnográfica, publicada recientemente en el International Journal of Human-Computer Studies, ha analizado durante tres años las prácticas de uso del mail de cerca de 400 personas de entre 64 y 80 años en centros sociales de Barcelona.

«En este contexto, la etnografí­a consiste en pasar mucho tiempo con los usuarios en contextos reales de interacción, observar cómo utilizan las tecnologí­as, hablar con ellos (conversaciones informales, entrevistas en grupo o individuales), y tomar notas de casi todo», explica Sayago.

Hasta el momento el diseño del correo electrónico se realizaba en laboratorios y se limitaba a hacer prototipos. «Nosotros nos hemos preguntado qué pasa en la vida real», explica el investigador.

Uso social de las tecnologí­as

«Las personas mayores se sienten motivadas para utilizar las TIC ya que lo perciben como un elemento importante para su inclusión en la sociedad contemporánea y luchar contra el aislamiento que puede aumentar con la edad», explica el estudio.

Los investigadores han demostrado que las personas mayores utilizan el correo electrónico dentro de un cí­rculo restringido de dos grupos sociales diferentes: los familiares (pocos mails al mes, pero detallados y emocionales) y los amigos í­ntimos (más frecuentes e intercambiando información basada en su socialización).

«Emplean el correo electrónico para comunicarse con sus cí­rculos sociales, no lo utilizan como un modo de entablar relaciones con personas que no conocen. Para ello tienen otras estrategias más basadas en su vida como ir a un centro social a un baile, y allí­ conocer a gente», afirma el investigador.

Autonomí­a con el ordenador

Existen tres prototipos de gestores de mail diseñados para gente mayor: el SeniorMail, que propone un rediseño del gestor de correo electrónico Outlook Express; el Simple Mail, un sistema simulado de correo electrónico con un interfaz de usuario simplificado a cinco funciones, y Cybrarian, basado en la reducción de funciones y en el aumento del tamaño de los elementos.

«Hemos observado que facilitarles y recordar los pasos para realizar tareas es más importante que aumentar el tamaño de los elementos de la interfaz. Eso viene dado por la relevancia que la gente mayor da a su independencia. No quieren depender de otra persona para poder enviar un e-mail y quieren utilizar los mismos mecanismos que el resto de la gente», explica el investigador.

Los investigadores son dinamizadores en un centro social de Barcelona donde se enseña las nuevas tecnologí­as a la gente mayor y a personas inmigrantes, por ello han recogido además del mail, datos sobre la interacción con otras tecnologí­as como la web 2.0, buscadores web, formularios online, aplicaciones de ofimática, para contextualizar los resultados.

«Tenemos la intención de combinar nuestros resultados con algunos experimentos controlados para determinar mejor el impacto de las barreras de accesibilidad que hemos identificado», concluyen los expertos.