El ex chofer de Osama bin Laden y un soldado canadiense capturados en Afganistán comparecerán hoy en la base naval estadounidense de Guantánamo, en Cuba, ante la comisión militar que los someterá a juicio, al que activistas describen como una parodia de la justicia.
Salim Ahmed Hamdan, el yemení nacido en 1970, es acusado de servir como guardaespalda y chofer de Bin Laden, jefe de la red terrorista Al Qaeda.
El gobierno alega que Omar Ahmed Khadr, nacido en Toronto y capturado a la edad de 15 años en 2002 en Afganistán, asesinó a un sargento estadounidense con una granada durante una redada en un escondite de Al Qaida.
Hasta el momento, el único proceso en Guantánamo, Cuba, ha sido el de David Hicks, el australiano de 31 años sentenciado a nueve meses en marzo, condena que cumple en una prisión de máxima seguridad en Adelaide.
Por medio de sus abogados, Hamdan y Khadr alegan que han sido golpeados, amenazados de muerte, amarrados, colocados en «posiciones de tensión» por horas, así como privados del sueño por largos periodos, durante su detención.
«Realmente es una mancha en la autoridad moral estadounidense», indicó Jennifer Daskal, directora en Estados Unidos de Human Rights Watch, al destacar que cualquier evidencia conseguida «a través de esos métodos» no es confiable.
El grupo exige el traslado de los procesos de Khadr y Hamdan a una Corte federal norteamericana.
El gobierno estadounidense niega cualquier maltrato a los detenidos en la prisión de Guantánamo, donde hay unos 380 sospechosos, capturados en Afganistán tras los ataques del 11 de septiembre de 2001 o raptados por agentes de la CIA en la «guerra contra el terrorismo» de Washington.
Pero activistas han criticado particularmente el caso de Khadr, por su corta edad.
«El tratamiento de Omar Khadr en los pasados cinco años muestra el desprecio estadounidense por las leyes internacionales en su ’guerra contra el terrorismo’», dijo Amnistía Internacional.
«Si las autoridades estadounidenses no lo someten a juicio en una corte civil, tomando en cuenta su edad al momento de los presuntos crímenes, debería ser regresado a Canadá».
Hamdan y Khadr comparecerán el lunes ante las comisiones militares, bajo un procedimiento instituido luego de que la Corte Suprema fallara contra el gobierno estadounidense.
Pero la máxima corte rechazó el mes pasado una apelación de Hamdan y Khadr contra los nuevos procesos aprobados por el Congreso en septiembre, allanando el terreno para su procesamiento.
Incluso si son absueltos, detenidos como Hamdan y Khadr pueden permanecer detenidos indefinidamente por Estados Unidos por ser considerados «combatientes enemigos», según han indicado funcionarios.
«El hecho de que jóvenes hayan sido usados en el campo de batalla es una realidad desafortunada en muchas partes del mundo», expresó el portavoz del Pentágono comandante J.D. Gordon.
En la comparecencia del lunes, se espera que las comisiones militares lean los cargos contra Hamdan y Khadr, que pueden declararse culpables o inocentes, antes de fijar una fecha para sus procesos que debería realizarse más adelante.
Hamdan es acusado de conspiración y brindar apoyo material a terroristas, mientras a Khadr se le imputa conspiración, asesinato, intento de asesinato y ayuda al enemigo.