Los Mavericks de Dallas abandonaron Los íngeles sintiéndose mordidos por una serpiente -y algo peor- después de un par de frustrantes derrotas que terminaron con los rivales encestando triples cruciales de último momento.
Chauncey Billups encestó ayer el más reciente con un segundo por jugar para dar a los Clippers de Los íngeles una sorprendente victoria de 91-89 sobre los campeones defensores de la NBA.
«Estaba tan libre que pude tomarme mi tiempo y disparar con tranquilidad», dijo Billups. «Trataron de evitarlo al final, pero para entonces ya había disparado. Tuve buena vista del aro y se sintió bien que haya encestado».
Mo Williams acertó sus primeros siete disparos y terminó con 26 puntos como suplente en su regreso a la alineación tras una lesión en el pie derecho. DeAndre Jordan terminó con 19 puntos y nueve rebotes por los Clippers, que jugaron su tercer partido en tres días después de un triunfo de 101-91 sobre Nueva Jersey el pasado lunes por la tarde y una derrota de 108-79 en Utah el martes por la noche.
Dirk Nowitzki y Delonte West anotaron 17 puntos cada uno por Dallas.
El armador de los Clippers Chris Paul se perdió su tercer juego consecutivo por una torcedura de ligamento y también Brian Cook con una torcedura de tobillo izquierdo. Pero tres de los últimos cinco juegos de los Clippers han incluido triunfos sobre Miami, los Lakers y los Mavericks -que los habían vencido 10 veces consecutivas y habían ganado 16 de 17 encuentros previos-.
Blake Griffin aportó 17 rebotes, 14 puntos y siete asistencias -la última concluyó en el arcoiris de larga distancia de Billups-.
«Griffin es muy explosivo y siempre busca atacar», dijo Nowitzki. «Representa el futuro de la liga y es divertido verlo jugar. De hecho creemos que hicimos un trabajo decente al encararlo esta noche».
Y en Nueva York, Steve Nash brindó la bella jugada de armador que en su momento hizo a la ofensiva de Mike D’Antoni murmurar y que ahora les hace mucha falta.
Luego, Shannon Brown acabó con los Knicks con un triple que cerca estuvo de fallar antes de rebotar de nuevo y caer en el aro, un disparo tan feo como este partido.
Steve Nash anotó 26 puntos y tuvo 11 asistencias y los Suns de Phoenix rompieron una racha de cinco derrotas al vencer ayer 91-88 a los Knicks de Nueva York.
Brown y Grant Hill anotaron cada uno 14 puntos por los Suns, que se recuperaron de una vergonzosa derrota de 118-97 ante un equipo de Bulls Chicago sin Derrick Rose la noche anterior.
Los Suns se beneficiaron de un afortunado rebote para el triple de Brown que casi golpeó lo alto del tablero antes de caer en el aro y que les dio una ventaja de cinco puntos cuando restaban 35 segundos. Nash finiquitó el encuentro con seis tiros libres en los últimos 16 segundos.
El entrenador de los Suns, Alvin Gentry, dijo que Nash, que encestó nueve de 12 tiros, está jugando tan bien como lo hizo en la temporada en que fue elegido el Jugador Más Valioso de la NBA bajo las órdenes de D’Antoni.
Nash indicó que el enfrentar a su ex entrenador y a su excompañero Amare Stoudemire, en la ciudad en que radica durante el verano, fue «una bienvenida de cierta manera» pero negó que la victoria adquiera más valor por haber sido frente a ellos.
«En este momento, podríamos vencer a cualquiera y sería bueno. Ha sido un año difícil, hemos tenido una racha complicada, por lo que para nosotros cualquier victoria es un enorme alivio y esperamos que nos dé cierta confianza y tal vez nos lleve a una racha positiva por un buen rato», dijo Nash.
El ex alero de los Suns Stoudemire anotó 23 puntos por los Knicks, que han perdido cuatro juegos consecutivos y no hallan respuestas para sus problemas ofensivos.
Iman Shumpert agregó 20 puntos y Landry Fields 17, pero Carmelo Anthony, tal vez aún resentido por una lesión en la muñeca izquierda, apenas encestó cinco de 22 disparos para terminar con 12 puntos y 11 rebotes.
En el resto de la jornada, Denver venció 108-104 a Filadelfia, Washington 105-102 a Oklahoma City, San Antonio 85-83 a Orlando, Boston 96-73 a Toronto, Nueva Jersey 107-100 a Golden State, Atlanta 92-89 a Portland, Memphis 93-87 a Nueva Orleáns, Minnesota 93-85 a Detroit y Sacramento 92-88 a Indiana.