La secretaria norteamericana de estado Hillary Rodham Clinton llegó hoy a Tahití en escala de una gira por seis países asiáticos durante la cual tratará de reafirmar los intereses estadounidenses ante la creciente influencia de China y calmar crecientes tensiones sobre disputas territoriales en el Mar del Sur de China.
Clinton aterrizó ayer por la noche en Tahití para una breve escala técnica en un viaje que la llevará desde las Islas Cook hasta el extremo oriente de Rusia. La gira la mantendrá bien lejos de la política estadounidense durante el cenit de las convenciones republicana y demócrata. Pero la coloca además en el centro de disputas marítimas entre China y vecinos menores.
Clinton visitará Beijing en el punto medio de su viaje de 11 días, que comienza en las remotas Islas Cook, donde será la primera secretaria (o secretario) de estado en visitar ese archipiélago del Pacífico sur en el que viven apenas 10.000 personas. En Rarotonga, la isla principal, Clinton asistirá a la reunión anual de funcionarios de Australia, Nueva Zelanda y las diminutas naciones insulares del Pacífico.
Funcionarios estadounidenses dijeron que Clinton va a reiterar el compromiso de Estados Unidos con el área, que enfrenta la amenaza de la elevación del nivel de las aguas a causa del calentamiento global y la decisión de continuar sus lazos estrechos con Occidente o inclinarse a las crecientes inversiones y poder de China.
De ahí, Clinton se dirigirá a Indonesia, sede del secretariado de la Asociación de Países del Sudeste Asiático, y posteriormente a Beijing, donde analizará la disputa territorial en el Mar del Sur de China y asuntos como la situación en Siria y los programas nucleares de Irán y Corea del Norte.
Clinton visitará además Timor Oriental, Brunei y Vladivostok, Rusia, donde representará a Estados Unidos en una reunión de líderes de países de las costas del Pacífico.