Chile propuso a Bolivia avanzar en un proceso de integración energética en el campo de electricidad, geotérmica y de cooperación técnica, en la reunión realizada ayer en La Paz entre autoridades hidrocarburíferas de ambos países que negaron haber discutido el tema gasífero.
El ministro de Energía chileno, Marcelo Tokman, se reunió con su colega boliviano de Hidrocarburos, Carlos Villegas, y ambos conversaron -según dijeron- «sobre el interés de avanzar en la integración y cooperación energética entre los países de la región, considerando el carácter de largo plazo en materia energética».
El ministro chileno, acompañado por el gerente general de la Empresa Nacional del Petróleo (Enap), Enrique Dávila, explicó que propusieron a Bolivia integración energética en tres áreas: participación en el análisis de factibilidad de alternativas de interconexción eléctrica en la región andina, prospección y exploración geotérmica en la frontera común y cooperación técnica en materia de hidrocarburos.
«El deseo es avanzar a una mayor integración energética en la región», afirmó el ministro chileno, quien acotó que «desde la perspectiva energéetica de Chile a largo plazo, necesariamente se tiene que tomar en cuenta de qué forma se aprovechan el potencial y las complementariedades que hay en la región».
El ministro Villegas afirmó que el tema de un acuerdo energético gasífero no fue parte del encuentro, pues era «una reunión informativa».
«Ahora no se abordó el tema del gas. El gobierno boliviano tiene la postura amplia de escuchar las propuestas del gobierno chileno, ahora el gobierno dio a conocer propuestas sustantivas en las tres áreas mencionadas por el ministro Tokman», acotó.
Un eventual primer acercamiento para un futuro acuerdo gasífero figuraba como telón de fondo de la cita de los ministros, según reseñaron medios locales en los últimos días, por la urgente necesidad chilena de suplir sus deficitarias provisiones del energético desde Argentina.
Chile sufre penurias por depender únicamente de los suministros de gas argentino que cayeron de 22 millones de metros cúbicos diarios de gas (MMCD) el 2004 a entre 1,4 y 1,5 de MMCD a la fecha que sólo abastecen para la zona residencial y comercial de Santiago.
El gobierno del indígena Evo Morales, por su lado, tampoco ha ocultado su intención de llegar a Chile con sus fabulosas reservas de gas, las segundas de la región después de Venezuela.
El propio Villegas dijo en una anterior oportunidad que Bolivia «tiene otro mercado por el momento congelado pero importante», en referencia a Chile, aunque a renglón seguido aclaró que «no vamos a incurrir en los gravísimos errores de tomar decisiones a espaldas del pueblo boliviano».
El ministro Tokman, en la rueda de prensa, detalló que la participación de Bolivia en el campo de electricidad es el referido al programa de interconexión que impulsa su país, junto a Colombia, Ecuador y Perú, que cuenta con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
En el campo geotérmico, Chile sugirió el trabajo conjunto entre Enap y la estatal petrolera boliviana YPFB para la exploración y prospección en la frontera, como en la región de «laguna colorada», en el extremo sudoeste de Bolivia.
La reunión binacional también evaluó que Enap y YPFB establezcan una relación para un «probable programa de cooperación técnica en materia hidrocarburífera».
Villegas, a nombre del gobierno boliviano, se comprometió «a poner (la propuesta chilena) en consideración del equipo de hidrocarburos del gobierno nacional» y que la respuesta sería comunicada en una próxima oportunidad, aunque no precisó cuándo.
Tokman y Villegas propiciaron una inédita reunión energética entre los dos países, que no mantienen relaciones diplomáticas desde marzo de 1978.