ífrica, sus ritmos y sus danzas fueron los protagonistas de la ceremonia de inauguración del 19º Mundial de fútbol, hoy en el estadio Soccer City de Johannesburgo, en un acto previo al partido inaugural Sudáfrica-México, donde no estuvo Nelson Mandela.
El torneo más importante del fútbol mundial se abrió de manera espectacular, con una exhibición aérea, con tres cazas supersónicos y después cinco aviones que hicieron acrobacias antes de llenar el cielo de los cinco colores de la bandera sudafricana (verde-rojo-amarillo-azul-negro-blanco).
Con el sonido omnipresente de las vuvuzelas, las ruidosas trompetas unidas inevitablemente al fútbol en Sudáfrica, bailarines y músicos brindaron a los hinchas un gran espectáculo previo al duelo entre los «Bafana Bafana» y el equipo azteca (14h00 GMT).
En una intervención sobre el césped, minutos antes de ese partido, los presidentes de la Federación Internacional (FIFA), Joseph Blatter, y de Sudáfrica, Jacob Zuma, inauguraron la competición.
«Aquí estamos, queridos amigos. El Mundial está en ífrica, ¡el Mundial está en Sudáfrica! Incluso aunque no esté aquí, el espíritu de Mandela está en el Soccer City», comentó Blatter.
El ex presidente y Premio Nobel de la Paz no acudió a la apertura mundialista en señal de duelo por la muerte de una bisnieta.
«Quería venir, pero desgraciadamente sufrió una tragedia en su familia», explicó Zuma, antes de declarar oficialmente abierto el Mundial. «El espectáculo debe comenzar, ¡disfrutadlo!», dijo Zuma, repitiendo el mensaje que le había pedido transmitir al público el propio Mandela.
En la ceremonia previa, con trajes tradicionales y mucho color, distintos grupos participaron con músicas típicas de ífrica, desde Sudáfrica al Magreb, mientras el estadio iba llenándose poco a poco de espectadores, tras los grandes atascos en las vías de acceso.
Entre las estrellas invitadas, el trompetista sudafricano Hugh Masekele, el estadounidense R. Kelly, el argelino Khaled y el nigeriano Femi Kuti hicieron bailar a una hinchada más que motivada.
Las tribunas naranjas y oro del Soccer City celebraban así un hito histórico en la historia deportiva del continente: por primera vez, el Mundial de fútbol llega a ífrica, tras años de dudas, polémicas e incertidumbres.
La estrellas del R&B (rythm & blues) R. Kelly cantó acompañado de voluntarios que llevaron las 32 banderas de los países participantes, en orden alfabético, terminando con un sonoro «South Africa» (Sudáfrica), que abrió un ruido ensordecer de gritos, aplausos y vuvuzelas.
El primer presidente negro del país, Nelson Mandela, ausente de los actos de apertura tras la muerte este viernes de una bisnieta, había pedido incluir en el espectáculo una canción británica titulada «Hope» (Esperanza), que debía ser interpretada por el joven tenor sudafricano Siphiwo Ntshebe.
Su deseo no pudo cumplirse, ya que el intéprete murió el 25 de mayo a los 34 años, víctima de una meningitis, por lo que fue sustituido por Timothy Moloi.
Mandela fue el gran ausente del día en Johannesburgo, pero otro Premio Nobel de la Paz sudafricano, el ex arzobispo anglicano de Ciudad del Cabo Desmond Tutu, participó de la fiesta a sus 78 años, llevando una camiseta de los «Bafana Bafana».
El presidente de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA), Joseph Blatter, calificó de «sueño hecho realidad» el Mundial de Sudáfrica-2010, en una intervención en la apertura del torneo, donde recordó a Nelson Mandela, ausente tras la muerte de una bisnieta.
«Aquí estamos, queridos amigos. El Mundial está en ífrica, ¡el Mundial está en Sudáfrica! Incluso aunque no esté aquí, el espíritu de Mandela está en el Soccer City», comentó Blatter en un mensaje desde el césped de Johannesburgo, justo antes del partido Sudáfrica-México.
El ex presidente y Premio Nobel de la Paz no acudió a la apertura mundialista en señal de duelo por la muerte de una bisnieta en un accidente de tráfico, en la noche del jueves al viernes.
«Quería venir, pero desgraciadamente sufrió una tragedia en su familia», explicó el presidente del país, Jacob Zuma, antes de declarar oficialmente abierto el Mundial.
«El espectáculo debe comenzar, ¡disfrutadlo!», dijo Zuma, en una frase que le transmitió Mandela como mensaje para el público.