Doc Rivers sumó una victoria más en Boston.
El entrenador que guió a los Celtics al título de la NBA en 2008 regresó por primera vez con los Clippers de Los Ángeles ayer y derrotó a Boston 96-88.
Jamal Crawford anotó 21 puntos, encestando un par de triples en 23 segundos para ayudar a los Clippers a tomar amplia ventaja en los últimos tres minutos.
«Fue un día en verdad agradable», dijo Rivers, luchando por no derramar las lágrimas en su conferencia de prensa posterior al partido. «Este es, es simplemente un lugar con clase… El público apoya a sus equipos y adoran a sus deportistas. La mejor decisión que he tomado sucedió hace 10 años, cuando decidí venir».
Chris Paul sumó 22 puntos, nueve asistencias y siete rebotes, y Blake Griffin anotó 18 unidades por los Clippers, que cosecharon su séptimo triunfo en 10 compromisos. La semana de las reuniones continúa el jueves para Rivers, cuando enfrenta a los ex Celtics Paul Pierce y Kevin Garnett —ahora jugadores de los Nets de Brooklyn.
«Fue una victoria realmente especial», dijo Crawford. «Uno podía ver sus emociones. No sé qué estaba sucediendo dentro de él».
Jeff Green anotó 29 puntos contra su antiguo entrenador, que fue cedido en un canje a Los Ángeles tras la campaña anterior a cambio de una selección en la primera ronda del reclutamiento colegial. Jordan Crawford totalizó 20 puntos y nueve asistencias, mientras que Brandon Bass acumuló 17 tantos y 12 rebotes por los Celtics, que sufrieron su segundo revés consecutivo.
«No fue emotivo», dijo Green, uno de apenas un puñado de jugadores de la plantilla de Celtics del año pasado que siguen con el equipo. «Sólo tratamos de ganar un partido, tan sencillo como eso».
Rivers recibió una ovación de pie al entrar a la cancha para el calentamiento de los Clippers, otra serie de aplausos al ser anunciado y un recibimiento más caluroso después de la proyección de un video en las pantallas de la pizarra que terminó con un «Gracias, Doc!»
«Soy un tipo emotivo», dijo Rivers antes del encuentro. «Sólo espero ser capaz de entrenar esta noche».
Rivers lo hizo bien, recibiendo 34 puntos de sus suplentes en contraste con sólo cuatro tantos de la banca de Boston. Los Celtics llegaron a tener una ventaja de hasta nueve puntos en la primera mitad, pero los Clippers la borraron en un tercer cuarto de ida y vuelta en el que la ventaja cambió de bando cinco veces.
Mientras que en Nueva York, la ventaja se perdió y los Knicks estuvieron en peligro de una derrota que les habría dolido mucho más que sus dos descalabros consecutivos.
«Desde un enfoque mental, si este partido se nos hubiera ido, no sé qué habría sucedido», reconoció Carmelo Anthony.
No fue así, gracias al mejor momento de Amare Stoudemire de la temporada.
Anthony terminó con 30 puntos y 10 rebotes, Stoudemire encestó el tiro del desempate a 2:35 minutos del final, y Nueva York rescató un triunfo de 83-78 sobre los Bulls de Chicago el miércoles luego de dejar ir una ventaja de 23 tantos.
Stoudemire terminó con 14 puntos y nueve rebotes por los Knicks, que pusieron fin a una racha de dos derrotas seguidas pero se complicaron las cosas ellos mismos más de lo necesario con una floja actuación ofensiva en la segunda mitad.
En el resto de la jornada, Orlando venció 92-83 a Charlotte, Minnesota 106-99 a Filadelfia, San Antonio 109-77 a Milwaukee, Oklahoma City 116-100 a Memphis, Nueva Orleáns 111-106 a Detroit en tiempo extra, Utah 122-101 a Sacramento y Golden State 95-93 a Dallas.