Jorge Mario Diéguez Pilón
El Adviento según el Diccionario Enciclopédico UTHEA, es el Tiempo Santo que celebra la Iglesia desde el Domingo primero de los cuatro que preceden a la Natividad de Jesucristo, o sea la venida del Hijo de Dios entre los hombres, hasta la Vigilia de esta Fiesta.
La Iglesia para comenzar el año litúrgico, celebra la llegada de Cristo con una gran fiesta a la cual llamamos Navidad. Esta fiesta es tan importante para los cristianos que la Iglesia, antes de celebrarla, prepara a sus hijos durante el período conocido como Adviento.
La palabra Adviento, como se conoce este período, significa «llegada» y claramente indica el espíritu de vigilia y preparación que los cristianos deben vivir. Al igual que se prepara la casa para recibir a un invitado muy especial y celebrar su estancia con nosotros, durante los cuatro domingos que anteceden a la fiesta de Navidad, los cristianos preparan su alma para recibir a Cristo y celebrar con í‰l su presencia entre nosotros.
En este tiempo es muy característico pensar: ¿Cómo vamos a celebrar la Noche Buena y el día de Navidad? ¿Con quién vamos a disfrutar estas fiestas? ¿Qué vamos a regalar? Pero todo este ajetreo no tiene sentido sino consideramos que Cristo es el festejado a quien tenemos apreciado dentro de nuestra propia vida; por lo que el período de Adviento nos sirve para preparar ese regalo que Jesús quiere, es decir, celebrarlo debidamente preparados espiritualmente.
Algunas familias se unen para orar, en otros lugares o países, familiares y amigos celebran las Posadas rezando el Rosario, recordando el peregrinar de María y José para llegar a Belén. En todas estas actividades se da la esperanza y el espíritu de fraternidad y generosidad que surge de la alegría de que Dios pronto estará con nosotros. Amén.