Graffiti en vivo. Fotos tempranas de Andy Warhol, un Picasso en subasta y una mujer desnuda viviendo en un chiquero con cerdos. Todo ello es parte de la exposición Arte Basilea Miami Beach, que se realizará del 1 al 4 de diciembre.

Mañana, en la Galerí­a Ana Lucí­a Gómez –Arte Latinoamericano- (16 calle 7-30 zona 13), a las 19:00 horas, se inaugura la exposición “Carlos Mérida, 120 años”, que conmemora el natalicio de este celebérrimo artista guatemalteco, quien cumplirí­a años el próximo 2 de diciembre. La muestra permanecerá abierta hasta el 23 de diciembre.

Hollywood, considerada durante años la tierra de los excesos, se está volviendo un tanto más austera en un momento en que los ejecutivos de la industria cinematográfica se replantean si están dispuestos a financiar una superproducción.

El mundialmente famoso sombrerero Stephen Jones estaba en un taxi en Londres cuando la plática con el chofer pasó inevitablemente al tema de lo que uno se pone sobre la cabeza.

Tres inusuales pinturas de interiores de sinagogas hechas por Marc Chagall se rematarán en diciembre en la ciudad de Nueva York, informó el viernes una casa de subastas.

Especialistas en pintura corporal, diseñadores de vestuario y tatuadores de 18 paí­ses compartieron sus vivencias y mostraron el colorido, los estilos y las formas más asombrosas de su obra en el VI Encuentro Mundial del Arte Corporal.

Las subastas de arte latinoamericano realizadas esta semana en Christie’s y en Sotheby’s tuvieron como estrellas obras de Rufino Tamayo y Fernando Botero, las cuales ayudaron a que se facturara un total de 40,1 millones de dólares.

El óleo de Rufino Tamayo «Rebanadas de sandí­a» se vendió por 2,2 millones de dólares, ligeramente por encima del estimado por Sotheby’s, mientras que otras obras del maestro mexicano alcanzaron precios de varios cientos de miles de dólares.

Una pintura del realista L.S. Lowry igualó el precio récord mundial para el artista en una subasta realizada en Londres, informó ayer la casa Christie’s.

Habitar un vagón de ferrocarril sin electricidad ni agua parecerí­a difí­cil en los tiempos actuales, pero era el comienzo de lo que se esperaba fuese una vida mejor para los inmigrantes mexicanos que llegaron a principios del siglo pasado a una región conocida hoy como las Quad-Cities.