El ministro británico del Interior, John Reid, preside hoy una nueva reunión de urgencia del comité de coordinación «Cobra» de las agencias de seguridad sobre el caso Alexander Litvinenko, el ex espía ruso muerto envenenado en Londres.
El jueves se abrirá una investigación judicial sobre el envenenamiento del ex espía, informó por otro lado un portavoz oficial.
Este tipo de investigaciones son corrientes en Inglaterra en caso de muerte sospechosa. Se llevan a cabo a la par que las averiguaciones policiales.
El lunes todavía no se había realizado ninguna autopsia del cuerpo de Litvinenko ya que el «coroner» (magistrado encargado de seguir la investigación judicial) está tratando de dictaminar si la dosis masiva de radiaciones recibida por el ex espía no es peligrosa para los que deben practicarla.
El ministro del Interior, John Reid presidirá la reunión que, según declaró a la AFP una portavoz del mismo, está encaminada a «tratar preocupaciones de salud pública así como otras cuestiones».
Por su parte, el portavoz de Tony Blair, reconoció el lunes que «sería prematuro establecer conclusiones» sobre la muerte del ex espía ruso.
«Se está realizando una investigación policial y todavía tenemos que esperar los resultados. Me parece prematuro establecer conclusiones en este momento», dijo.
Alexandre Litvinenko, ex espía ruso, falleció el jueves con 43 años en un hospital londinense después de haber sido envenenado con una dosis masiva de radiaciones.
El comité «Cobra» (Cabinet Office Briefing Room A) se reúne puntualmente, ante acontecimientos considerados como graves, en habitaciones protegidas con excepcionales medidas de seguridad.
Desde el jueves por la tarde se han celebrado diversas reuniones de «Cobra». Su presidencia puede variar en función de la naturaleza del acontecimiento.
En 2005, el comité de coordinación se reunió tras los atentados de Londres del 7 de julio, que provocaron 56 muertos. Lo hizo igualmente tras el descubrimiento el pasado mes de abril del virus HN51 de la gripe aviar en territorio británico así como después de las últimas investigaciones el pasado 10 de agosto sobre el supuesto complot para atentar contra aviones comerciales.
Tres personas han sido enviadas a una clínica especial donde serán sometidas a pruebas radiológicas, tras la muerte el jueves en Londres del ex espía ruso Alexander Litvinenko, que recibió una dosis masiva de radiaciones, indicó el lunes una portavoz oficial.
«Tres personas fueron enviadas a una clínica especial para una evaluación radiológica», indicó la portavoz de la Agencia de Protección de Salud (HPA).
Esta fuente destacó que era una «medida de precaución», tras la muerte del ex espía, que suscitó temores de que la radiación hubiera afectado a las personas que estuvieron cerca de él.
Rastros del material radiactivo polonio 210, con el que supuestamente fue envenenado Litvinenko, fueron hallados en el hotel Millennium de Grosvenor Square, en el restaurante japonés Itsu de Piccadilly, ambos en el centro de Londres, y en el domicilio del ex agente.
La investigación se centra ahora en determinar los movimientos de Litvinenko y en identificar a la gente con la que se reunió antes de caer enfermo.