Las tensiones entre McChrystal y la Casa Blanca quedan al descubierto en un largo artículo de la revista estadounidense Rolling Stone publicado el lunes.
«McChrystal fue convocado a asistir a la reunión mensual (del miércoles) sobre Afganistán y Pakistán personalmente», en lugar de comparecer en teleconferencia vía satélite, «para que explique al Pentágono y al comandante en jefe sus declaraciones», dijo un alto funcionario de la Casa Blanca.
En el artículo de Rolling Stone, McChrystal bromea sobre cómo prepararse para responder a una pregunta, refiriéndose al vicepresidente Joe Biden -conocido por su escepticismo ante la estrategia militar del comandante-, e imagina la manera de «despedir al vicepresidente en una sola frase».
El general, comandante de los 142.000 soldados de la coalición en Afganistán, también dijo a la revista que se sintió traicionado por el embajador estadounidense en Kabul, Karl Eikenberry, durante un debate el año pasado en la Casa Blanca sobre la estrategia en Afganistán.
También se refiere al presidente Obama, recordando las fricciones entre el ejército y la Casa Blanca el pasado otoño boreal, cuando el mandatario reflexionaba sobre el envío de refuerzos que reclamaba McChrystal. El general afirma que fue un momento «penoso».
Y un asesor no identificado de McChrystal dice en el artículo que el general salió poco impresionado de una reunión con Obama en la Casa Blanca hace un año: «Fue una sesión fotográfica de 10 minutos», afirma.
«Obama claramente no sabía nada de él (…) No parecía muy comprometido», añadió el consejero.
Un colaborador de McChrystal también califica al asesor de seguridad nacional Jim Jones, un general retirado, como «un payaso» que está «anclado en 1985».
McChrystal emitió un comunicado a última hora del lunes, disculpándose por sus declaraciones a la revista.
«Extiendo mis más sinceras disculpas por este artículo», dijo McChrystal en un texto divulgado horas después de que la nota, titulada «El general fugitivo» («The Runaway General»), saliera publicada. «Fue un error que refleja poco criterio y que nunca debió haber ocurrido».
El jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, el almirante Michael Mullen, habló con McChrystal después del explosivo artículo, según dijo este martes a AFP un portavoz.
Mullen «habló con el general McChrystal en la noche del lunes sobre el artículo y expresó su profunda decepción», dijo el capitán John Kirby.
McChrystal, ex jefe de operaciones especiales, por lo general habla con cautela en público y ha tenido una buena relación con los medios estadounidenses desde que asumió el liderazgo de la fuerza dirigida por la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) el año pasado.
Pero el artículo en la Rolling Stone parece haberlo tomado a él y a su personal en un momento de descuido.
En el artículo, McChrystal se ríe cuando le preguntan sobre el vicepresidente. «Â¿Me estás preguntando sobre el vicepresidente Biden?», dice, riendo. «Â¿Quién es ese?», cita el artículo.
También denigra al enviado especial de Estados Unidos para Afganistán y Pakistán, Richard Holbrooke. «Otro email de Holbrooke», afirma mirando su teléfono celular. «No quiero ni abrirlo», agrega.
McChrystal ya había recibido una amonestación de Obama meses atrás, tras dar un discurso en el que parecía criticar el argumento de Biden a favor de reducir las tropas en Afganistán.
El presidente Barack Obama está «enojado» por las mordaces críticas que hizo en una entrevista su comandante militar en Afganistán, Stanley McChrystal, mientras la Casa Blanca se negó a descartar la posibilidad de despedir al general, según informó su portavoz.
Obama «estaba enojado» y ordenó que regresara a Washington, dijo el portavoz Robert Gibbs, describiendo así la reacción del presidente cuando se le entregó el explosivo artículo de la revista Rolling Stone publicada ayer.
«Sin duda, el general McChrystal, como dijo el secretario (de Defensa, Robert) Gates, cometió un enorme error», dijo Gibbs, añadiendo que Obama hablaría con el general sobre el asunto el miércoles.
Gibbs no dijo si McChrystal sería despedido o no, pero señaló que «todas las opciones están sobre la mesa».
En el artículo, McChrystal y sus asesores hacen críticos y burlones comentarios sobre Obama, el comandante en jefe de la nación, así como sobre el vicepresidente Joe Biden y otros altos funcionarios de la Casa Blanca.