Canó vence a González en el Derby de Jonrones


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Robinson Canó superó a Adrián González para alzarse ayer con el triunfo en el Derby de Jonrones, que se convirtió en otro duelo entre Yanquis y Medias Rojas.

Con el último turno, el dominicano Canó derrotó 12-11 al mexicano González. Ambos llegaron a la fase decisiva tras conectar 20 vuelacercas en las dos primeras rondas.

PHOENIX Agencia AP

«De niño sueñas con estar aquí­, como muchos jugadores a quienes veí­as, como Sammy Sosa, Ken Griffey, Mark McGwire, Jason Giambi. ¡Vaya que se divertí­an!», rememoró Canó.

El dominicano bateó con su padre José como el lanzador en el Chase Field de Phoenix. José Canó fue un pitcher en las Grandes Ligas que tuvo una breve trayectoria de seis apariciones con los Astros de Houston en 1989.

«Un gran padre, siempre estoy agradecido por su apoyo», dijo Canó.

Canó, segunda base de Nueva York, se convirtió en el quinto dominicano en ganar la exhibición de jonrones, que se disputa desde 1990. Los otros ganadores quisqueyanos son Sammy Sosa, Miguel Tejada, Vladimir Guerrero y David Ortiz, quien hizo de capitán de los artilleros de la Liga Americana.

El Derby volvió a resaltar los riesgos de tratar de atrapar pelotas en un estadio de béisbol, ya que un aficionado que estaba ubicado en una mesa encima de una piscina estuvo a punto de caer unos 20 pies (6 metros) durante la exhibición al querer apoderarse de la esférica, tras un jonrón de Prince Fielder. El aficionado fue sujetado por su hermano.

«Me paré en la mesa. Me perdí­ la bola por dos o tres pies (60 o 90 centí­metros) y me fui por arriba», relató el aficionado, Keith Carmickle. «Atrapamos tres pelotas y yo les habí­a dicho a mis amigos que iba por el ciclo».

La semana pasada, Shannon Stone, de 39 años, murió al intentar atrapar una pelota que habí­a sido lanzada a las tribunas del estadio de los Rangers de Texas en Arlington.

El hermano de Carmickle lo sujetó de los brazos, y Aaron Nelson tomó sus piernas.

«El no se iba a caer. Yo estaba aferrado a él», dijo Nelson».

El jonrón de la noche fue conectado por González, un batazo que depositó la pelota en la piscina situada en el jardí­n derecho. Junto con la pelota se sumergió Mike Moon, un fanático de 26 años, que atrapó la bola antes de caer en la piscina, donde quedó rodeado por mujeres en bikini.

En la noche previa al Juego de Estrellas, el total de Canó en la última ronda constituyó un récord.

Canó y González fueron los más dominantes de la noche, en la que eliminaron al campeón vigente Ortiz y a Fielder de Milwaukee, nueve cada uno, en la segunda ronda.

Matt Holliday de San Luis (5), el dominicano José Bautista de Toronto (4), Rickie Weeks de Milwaukee (3) y Matt Kemp de los Dodgers (2) no sortearon la primera ronda.

JACKSON
Condena ley


El reverendo Jesse Jackson instó a los participantes en el Juego de Estrellas a pronunciarse contra la ley de inmigración en Arizona, tras considerar que deberí­an seguir el ejemplo de Jackie Robinson, cuando se convirtió en el primer negro en jugar en las Grandes Ligas, hace más de medio siglo.

La atención del mundo del béisbol regresó esta semana a Arizona por primera vez desde que Luis González conectó un sencillo frente al panameño Mariano Rivera en el noveno inning, para que los Diamondbacks ganaran el séptimo juego de la Serie Mundial del 2011, frente a los Yanquis.

Así­, los participantes en el Juego de Estrellas —aquéllos que no se retiraron por lesiones— llegaron al foco del debate sobre la controversial y severa ley migratoria conocida como SB 1070.

El comisionado de las mayores, Bud Selig, no atendió las peticiones de algunos grupos para cambiar la sede del encuentro del martes.

«Es evidentemente muy tarde para que ellos se retiren de este lugar», dijo Jackson el lunes, durante una entrevista telefónica con The Associated Press. «Creo que ellos deben jugar y deben hablar, algo que serí­a valioso».

Mientras los jugadores se preparaban para reunirse en el diamante del Chase Field, protegido bajo un techo y refrescado por el aire acondicionado, la mayorí­a se negó a hablar sobre la ley. Promulgada el año pasado, la medida requiere que los inmigrantes porten documentos que acrediten su permanencia legal en el paí­s, y permite a la policí­a, cuando vigile el cumplimiento de otras leyes, interrogar a una persona sobre su estatus migratorio si hay una sospecha razonable de que ese individuo se encuentra ilegalmente en Estados Unidos.

Las provisiones principales de la ley fueron bloqueadas en julio pasado por la jueza federal de distrito Susan Bolton, una decisión ratificada en abril mediante una votación de 2-1 por parte de la 9na Corte de Circuito Federal en materia de apelaciones. La gobernadora de Arizona, Jan Brewer, busca solicitar a la Corte Suprema federal la revocación de la orden que bloqueó la ley.

El toletero dominicano de Boston, David Ortiz, fue uno de los pocos dispuestos a hablar sobre la ley.

«Yo soy un inmigrante. Definitivamente nunca estarí­a de acuerdo con un maltrato a los inmigrantes», señaló el «Big Papi».

Sin embargo, descartó que vaya a participar en una protesta.

«No estoy aquí­ para eso», dijo Ortiz.

El toletero fue designado capitán del equipo de la Liga Americana para el concurso de cuadrangulares realizado el lunes. Sharon Robinson, hija del fallecido Jackie Robinson, estuvo en el terreno antes del acto, para una presentación de la organización caritativa «Breaking Barriers».

Una respuesta más tí­pica fue la del jardinero puertorriqueño Carlos Beltrán, quien será el bateador designado de la Liga Nacional.

«Esto es algo que no tiene relación con el deporte», consideró el toletero de los Mets de Nueva York. «Es algo que afecta a cierta parte de la población».

Somos América, un grupo defensor de los derechos de los hispanos, con sede en Phoenix, pidió a los aficionados, jugadores y coaches utilizar un listón blanco para mostrar solidaridad contra la ley.

«El béisbol fue crucial para cambiar la cultura, cuando se admitió a Jackie Robinson. Cambió la cultura estadounidense en formas fundamentales, más allá del diamante», dijo Jackson. «Algunos jugadores o sus familias podrí­an estar en desventaja o ser detenidos por las autoridades en Arizona. Así­ que es muy riesgoso. Esperarí­a que ahora, que están ahí­, por lo menos digan claro que esa ley está en conflicto con la ley nacional sobre inmigración. Los estados no fijan la polí­tica migratoria».

«Los jugadores de béisbol no pueden ceder su dignidad. Me alegra que Jackie Robinson haya hablado por la dignidad más allá del diamante, y me alegra que Ortiz haya hecho eso mismo».

AUSENCIAS
Jeter no, Reyes sí­


José Reyes pudo haberse quedado en su casa de Nueva York, descansar y seguir con la recuperación de una dolencia en la corva.

Pero el efervescente torpedero de los Mets de Nueva York hizo acto de presencia en Phoenix y hasta tomó unos turnos en la práctica del lunes, un dí­a antes del Juego de Estrellas.

«Esto significa mucho, pese a estar lesionado. No todos los años tienes la oportunidad de estar en un Juego de Estrellas. Cuando la tienes, hay que aprovecharla, no importa que no vayas a jugar», declaró Reyes.

El dominicano salió primero en la votación de los aficionados y no querí­a dar un gesto de desprecio: «Por eso vine acá, los fanáticos votaron para eso, para que yo fuera el shortstop».

Reyes no fue el único en esa situación. Otros jugadores debieron declinar la participación en el clásico de mitad de temporada ya sea por lesiones o por ser un lanzador que abrió el domingo.

«Es una pena que no pueda lanzar, esto es una experiencia que disfruto bastante», dijo el venezolano Félix Hernández, el as de los Marineros de Seattle y vigente Cy Young de la Liga Americana. El «Rey Félix» lanzó siete entradas el domingo.

Reyes recordó el hecho que ha estado lesionado en tres de las cuatro ocasiones que ha sido seleccionado para el partido, pero siempre acudió a la ciudad sede.

Tras quedar descartado por una lesión en un dedo de la mano, Shane Victorino, de los Filis de Filadelfia, explicó que su ausencia hubiese constituido una falta de consideración tras ser el último jugador seleccionado en una votación de los fanáticos a través de la Internet.

Pero varios nombres rutilantes no vinieron. El más destacado de ellos fue Derek Jeter de los Yanquis de Nueva York. Tampoco lo hicieron sus compañeros Alex Rodrí­guez (fue operado en la rodilla el lunes) y Mariano Rivera (acusaba una molestia en el trí­ceps derecho).

Jeter viene de una lesión en la pantorrilla, pero el sábado se fue de 5-5 y con un jonrón alcanzó los 3.000 hits en su carrera. El torpedero decidió no hacer el viaje al desierto de Arizona.

Su ausencia le valió un reproche de Bill Giles, el presidente honorario de la Liga Nacional y director ejecutivo de los Filis: «Me parece que está mal que en lo particular Jeter no esté aquí­, después de lo que logró el fin de semana. Creo que eso es un problemita y las Grandes Ligas tiene que estudiarlo».

David Ortiz, el toletero de Boston, salió en defensa de Jeter, diciendo que en el pasado siempre habí­a acudido.

«Creo que tiene el derecho de tomarse un descanso, especialmente tras salir de una lesión. La gente debe respetar eso», dijo Ortiz.

Albert Pujols es un astro que hubiese querido venir, pero el jonronero dominicano de los Cardenales de San Luis no fue seleccionado y recién la semana pasada volvió a la actividad tras adelantar un mes la recuperación de una fractura en la muñeca.

«Para ser honesto fue muy tarde cuando me enteré que Alberto querí­a venir, pero ya me habí­a decidido a traer a un tercer receptor», indicó Bruce Bochy, el manager de San Francisco, que dirigirá al equipo de la Liga Nacional.

Ese tercer receptor bendecido fue el venezolano Miguel Montero, de los anfitriones Diamondbacks y que debutará en estos juegos.

Con su hijo Angel de nueve meses cerca, Montero seguí­a maravillado por ser partí­cipe de las festividades: «Estaba en San Luis y me llamaron a la oficina del manager», contó. «‘Felicidades, vas al Juego de Estrellas. ¿En serio? No me tomen el pelo»’.

Otro debutante será Michael Pineda, el abridor dominicano de los Marineros de Seattle que suena para ser el Novato del Año.

«En la primavera estaba pensando en sólo hacer el equipo y ahora estoy en el Juego de Estrellas. Mejor imposible», dijo.