La huelga de guionistas de Hollywood obligó a la cancelación de la fiesta Vanity Fair, una de las citas más glamorosas que cada año se realiza tras la ceremonia de los premios Oscar, informaron ayer los organizadores.

«Después de muchas consideraciones, y en apoyo a los guionistas y cada uno de los afectados por esta huelga, hemos decidido que no es el año apropiado para realizar la fiesta anual del Oscar», explicó en un comunicado la organización de esta fiesta auspiciada por la importante publicación estadounidense.

Esta cita que suele reunir la crema y nata de la industria del entretenimiento, donde son convocados también figuras polí­ticas del paí­s, es una de las más exclusivas que se organiza en Hollywood después de la premiación.

«Deseamos felicitar a todos los nominados de este año y seguimos adelante para celebrar nuestra décimo quinta fiesta del Oscar el próximo año», apuntó el comunicado.

La cancelación de esta fiesta se produjo en horas que medios especializados mencionan la posibilidad de un pronto final de la huelga, tras varios dí­as de negociaciones a puerta cerrada entre el gremio de guionistas (WGA) y los productores de la industria.

La temporada de premios de Hollywood este año se vio opacada por esta huelga iniciada el 5 de noviembre luego de que los guionistas no alcanzaran un acuerdo sobre los porcentajes de ganancias por la comercialización de productos audiovisuales en internet.

Aunque el conflicto se cobró la suspensión de decenas de rodajes de pelí­culas y series de televisión así­ como la ceremonia de entrega de los Globos de Oro, fuentes cercanas a las conversaciones gremiales han dejado entrever en las últimas horas de que la del Oscar, pautada para el 24 de febrero, ya no está en peligro.