Abajo por un punto en el último minuto, Derek Fisher revirtió lo que era un atolladero del Thunder y los Grizzlies sufrieron su peor pesadilla.

Fisher le robó el balón a Mike Conley, de Memphis, para que Kevin Durant recorriera la cancha con la oportunidad de dar la ventaja al Thunder.

Durant se elevó y encestó a 11,1 segundos del final con los últimos dos de sus 35 puntos, para darle al Thunder de Oklahoma City una gran victoria ayer por 93-91 sobre los Grizzlies de Memphis en el primer partido de su serie en semifinales de la Conferencia del Oeste.

«Sólo quería recorrer la cancha lo más rápido posible y hallar la oportunidad de disparar», dijo Durant, que terminó en el segundo lugar en la votación anunciada el domingo por el jugador más valioso de la NBA. «Ese fue el único tiro que pude encontrar y, por la gracia de Dios, fue bueno».

Reggie Jackson encestó dos tiros libres para aumentar la ventaja a tres tantos y Quincy Pondexter sólo pudo acertar uno de sus tres tiros libres a 1,6 segundos del final.

Pondexter, que ha acertado el 72% de los tiros libres en su carrera, falló el primero. Encestó el segundo intento antes de fallar intencionalmente el tercero, pero Durant dio un golpe al balón y el disparo de Marc Gasol fue tardío. El pivote español terminó con 20 puntos, 10 rebotes y tres asistencias en poco más de 40 minutos de juego.

«No pudimos frenarlos. Por eso perdimos», dijo Gasol. «No perdimos debido a los tiros libres».

Kevin Martin anotó 25 tantos por Oklahoma City, que por la mayor parte del juego estuvo en desventaja pero evitó repetir la derrota que sufrió en un primer encuentro cuando ambos equipos se enfrentaron en las semifinales de la Conferencia Oeste hace dos años. El Thunder fue capaz de remontar y ganar esa serie en siete enfrentamientos.

El segundo partido de la serie se jugará el martes en Oklahoma City.