Tras el nombramiento de Marlene Raquel Blanco Lapola como nueva directora general de la Policía Nacional Civil (PNC), y Rember Aroldo Larios Tobar como director adjunto, los nuevos funcionarios anunciaron un nuevo periodo de depuración dentro de la institución.
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Después del escándalo generado por la aprehensión de dos subinspectores policíacos la semana pasada y las denuncias públicas sobre la participación de policías en actos ilícitos, el presidente ílvaro Colom nombró ayer a los nuevos directivos de la PNC.
Blanco y Larios -ambos con amplia trayectoria dentro de la institución- sustituyen a Isabel Mendoza y Henry López, quienes dejan los cargos luego de cumplir con su tiempo de servicio.
En su segundo día de actividades al frente de la fuerza policial, Blanco sostuvo una reunión con el ministro de Gobernación, Francisco Jiménez Irungaray, quien ratificó su apoyo a los nuevos titulares, informó el portavoz de esa cartera, Nery Morales.
La funcionaria indicó que se realizará un diagnóstico del personal que trabaja en la PNC y del presupuesto que se tiene asignado a la institución, ya que dentro de sus planes se contempla incrementar el salario de los agentes de seguridad como una medida para dignificar su labor.
Blanco destacó que se realizará una investigación profunda de las denuncias emitidas contra la policía, incluyendo los casos de acoso sexual contra las mujeres que trabajan en la institución. «Yo también fui una víctima», señaló.
En el Congreso
Por otro lado, Larios acudió al Congreso de la República, donde anunció cambios importantes en la institución, donde resalta la promesa de continuar con el proceso de depuración de los elementos implicados en actos ilícitos.
El nuevo subdirector adjunto reveló que se investiga a una buena cantidad de personal de la institución, de quien se ha recibido denuncias por abuso de autoridad, cohecho y violación de derechos humanos contra la población.
Oportunamente y en respeto a la decisión que tome Blanco, ella dará a conocer en los próximos días el número de involucrados que actuaron fuera de la ley, explicó el jefe policial.
La población y los buenos policías se han encargado de denunciar a los elementos que han actuado al margen de la ley, es por ello que hay muchas denuncias en la oficina de Responsabilidad Profesional, agregó.
La nueva política en la PNC, será implementar una nueva selección y reclutación de personal, la necesidad de reactivar la escuela de oficiales, agregó el Subdirector General Adjunto.
Objetivos claros
Para Adela Camacho de Torrebiarte, ex ministra de Gobernación, los objetivos de la PNC están claros, «se debe hacer un análisis general de la institución para determinar qué cambios son los más urgentes».
«La depuración de la policía es un hecho que no se puede obviar, así como el fortalecimiento de la Academia, para que los agentes en entrenamiento concluyan sus estudios con una mejor preparación», agregó.
Según Camacho, el gobierno debe apuntar al fortalecimiento de la PNC como una respuesta a la situación de violencia en el país. «El fortalecimiento de la institución es urgente».