Cambio climático amenaza a glaciares


Efectos. Los glaciares podrí­an verse afectados por el cambio climático.

El recalentamiento climático en el norte de Canadá acelera la amenaza sobre los inmensos glaciares, susceptibles de romperse en grandes pedazos que floten por el Atlántico, advierte el geógrafo Luke Copland, al regresar de una misión en un iceberg del tamaño de Manhattan.


El profesor de la Universidad de Ottawa y su colega Derek Mueller de la Universidad de Alaska-Fairbanks visitaron esta semana la «Isla de hielo Ayles», un inmenso cubo helado de 66 km2 a la deriva tras separarse en agosto de 2005 de un glaciar de la Isla Ellesmere Island en el extremo norte de Canadá, a 800 km del Polo.

«Aterrizamos sobre la isla de hielo e instalamos unos faros satelitales que nos permitirán seguir su movimiento, así­ como termómetros», indicó Copland a la AFP.

La «ruptura» del glaciar Ayles, que dio vida a la isla flotante epónima, emitió tal energí­a que fue detectada por aparatos sismológicos canadienses ubicados a 250 km.

En ese momento, nadie pudo identificar de qué se trataba. Pero Copland logró reconstruir el evento a través de una cadena de información, y determinó que esta fue la ruptura más importante de un glaciar en 25 años en el írtico canadiense.

Y finalmente pudo poner pie esta semana sobre la isla que contribuyó a descubrir, en una expedición seguida por un equipo de la cadena británica BBC.

«Fue la primera vez que lo vi. Es verdaderamente impresionante. Generalmente la superficie de los hielos está llena de asperezas, pero acá es un inmenso pedazo de hielo plano y liso», narró el geógrafo.

Después de su separación de la Isla de Ellesmere, la «Manhattan de hielo» ha navegado poco menos de 100 kilómetros, aunque no se ha movido en los últimos meses, prisionera del hielo en el mar.

«Es increí­ble la velocidad a la que una isla de hielo puede moverse, si no fuera frenada por los hielos que hay en el mar», destaca Copland.

«Sabemos que la plataforma flotante se dirige hacia el oeste empujada por las corrientes marinas pero no sabemos en cuánto tiempo llegará a Alaska, quizá cinco o diez años», estima el geógrafo.

La temperatura media en el írtico ha aumentado dos veces más en el curso de los 100 últimos años que la media mundial, y de acá a 2100, el espesor y tamaño de los glaciares de esta región polar sufrirán «importantes disminuciones», según el Grupo Intergubernamental de Expertos en la evolución del Clima (IPCC) de la ONU.

Cinco glaciares de la Isla de Ellesmere se encuentran en un estado frágil, a juicio de los investigadores. «El glaciar Ward Hunt es el más importante de esa isla. Se rompió en dos en 2002 y otro perdió parte de su hielo en 2005. El porvenir no se muestra muy favorable para ellos», destaca Copland.

Estos glaciares gigantes también están amenazados por la desaparición del hielo que flota en el Océano írtico, lo que probablemente ocurra hacia 2040, según varios estudios.

«Normalmente el hielo en el mar ejerce presión sobre los glaciares y los protege. Pero si no existiera, las olas del Océano írtico se abatirí­an fácilmente sobre ellos», debilitándolos, explica Copland.

El dúo de investigadores también midió el espesor del hielo cerca del glaciar Ayles, donde nació la isla flotante de hielo, para tratar de comprender mejor el fenómeno.