El partido liberal demócrata (PLD), gobernante en Japón, comenzó hoy a buscar un sucesor para el primer ministro Shinzo Abe, quien renunció ayer tras numerosos escándalos, perfilándose el ex canciller Taso Aso como favorito para liderar a una derecha en crisis.
En momentos en que los candidatos se preparan a hacer su anuncio oficial, Abe fue hospitalizado por «tres o cuatro días» debido a problemas gástricos relacionados con el estrés, según su médico.
El PLD se reunirá el 23 de septiembre para escoger a su nuevo presidente, el cual se convertirá automáticamente en el próximo primer ministro.
Gran favorito, Taro Aso, de 66 años, actual número dos del partido de derecha, debe anunciar su candidatura el jueves en la tarde.
Este nacionalista popular, conocido por su franqueza, ya ha fracasado dos veces en su intento por acceder al puesto, siendo derrotado por Abe y por el ex primer ministro Junichiro Koizumi (2001-2006).
Aso, que goza de gran popularidad dentro del PLD, fue nombrado a fines de agosto secretario general del partido, lo que lo convierte en el candidato natural para suceder a Abe.
«Siempre lo he considerado como un político competente», declaró el influyente ex primer ministro Yoshiro Mori. «Pienso que será un candidato serio», añadió.
Sin embargo, algunos analistas dudan de la capacidad de Aso para sacar al PLD de la crisis en la que está sumergida desde la renuncia de Abe, subrayando que sus convicciones nacionalistas no lo diferencian mucho de este último.
«Algunos en el PLD consideran que el partido no podrá ganar las próximas elecciones legislativas con Aso a su cabeza», destaca el politólogo Takehiko Yamamoto.
Fuera de Aso, los principales candidatos potenciales son el ex portavoz del gobierno, Yasuo Fukuda, un moderado, y el ex ministro de Finanzas, Sadakazu Tanigaki, liberal.
El actual ministro de Finanzas, Fukushiro Nukaga, fue el primero en anunciar oficialmente el jueves su intención de ser candidato a la sucesión de Abe. Hizo un llamado al PLD a «superar las dificultades actuales».
En Tokio, donde la atmósfera política es eléctrica, la prensa pide que se convoquen elecciones legislativas anticipadas.
Desde su aplastante victoria en las elecciones senatoriales del 29 de julio, la oposición amenaza con usar su capacidad de bloqueo en la Cámara alta, frente a un PLD omnipotente en la Cámara de diputados, lo que presagia rudas batallas parlamentarias.
Muy fragilizado por una serie de escándalos en cadena, Abe, quien fuera el primer ministro más joven de la posguerra en Japón, decidió dejar su cargo menos de un año después de llegar al poder.
El ministro japonés de Finanzas, Fukushiro Nukaga, anunció el jueves su intención de ser candidato a la sucesión del primer ministro saliente Shinzo Abe.
«Voy a dar esa batalla. Muchos me dicen que hay que superar la crisis manteniéndonos unidos», declaró Nukaga tras una reunión con los miembros de su facción.
El partido liberal demócrata (PLD), gran formación de la derecha en el poder, debe reunirse el 19 de septiembre para escoger a su nuevo presidente, el cual se convertirá automáticamente en el próximo primer ministro.
Al renunciar el miércoles, Abe también dejó la presidencia del PLD, mayoritario en la Dieta, que tiene el poder de investir al jefe del gobierno.
De 63 años de edad, Nukaga fue también ministro de Defensa y es conocido sobre todo como especialista en este tema.
El ex canciller Taro Aso, 66 años, sigue siendo sin embargo el favorito para reemplazar a Abe, quien renunció tras un mandato de menos de un año marcado por numerosos escándalos.
Liberales elegirán
El gobernante Partido Liberal Democrático de Japón decidió hoy por la tarde que la fecha para celebrar la elección presidencial será el domingo, cuando se elegirá a un nuevo presidente del partido para reemplazar a Shinzo Abe, quien presentó su dimisión ayer, informó la prensa japonesa. (TOKIO / XINHUA)