El fondo del Banco Mundial (BM) que ayuda a los países más pobres reúne mañana a sus donantes en Berlín, con la ambición de juntar un monto récord, superior a la última colecta, que fue de 32.500 millones de dólares, gracias a la participación inédita de China y de empresas privadas.
«Esperamos alcanzar un nivel superior al de AID-14», la colecta anterior, dijo una fuente cercana a las negociaciones.
Creada en 1960, la Asociación Internacional para el Desarrollo (AID) otorga donaciones y créditos sin interés a los países cuyos habitantes ganan menos de 2 dólares por día, la mayoría en Africa sub-sahariana.
Los países donantes se reúnen cada tres años para reunir fondos y discutir sus políticas.
La última reunión (AID-14), terminada en febrero de 2005, tenía como objetivo financiar los proyectos hasta el 30 de junio de 2008.
En la cita de mañana se incorporan cinco nuevos donantes: Chipre, Egipto, Estonia, Letonia y Lituania.
Pero la gran noticia es la posibilidad de que se incorpore China, que cada vez más distribuye directamente su ayuda, principalmente en Africa, dijo la misma fuente.
«Las conversaciones están en curso», indicó. «Al llegar sabremos si los chinos participan como observadores o si vienen a sentarse en la mesa principal», agregó.
Por otra parte, el llamado lanzado a fines de octubre por el nuevo presidente del BM, Robert Zoellick, a favor de que el club se abra a donantes privados parece haber tenido eco.
«Se acercaron dos empresas japonesas», dijo la fuente.
Los montos conversados no superan los 400 mil dólares, pero «la gran noticia es más bien el aspecto simbólico del asunto», afirmó.
Pero si bien hay buenos augurios, en el fondo nada está definido. «Seguimos a merced de las circunstancias presupuestarias, del humor de los contribuyentes y de las fluctuaciones monetarias», dijo la fuente.
El campo de acción de la AID es vasto: estimular el crecimiento económico, atenuar las desigualdades o mejorar las condiciones de vida de las distintas poblaciones.
Actualmente la tendencia es destinar fondos a causas precisas, como la educación o la lucha contra el paludismo o el VIH/sida.
Dos de los tres principales contribuyentes de la AID -Estados Unidos y Japón- se ven perjudicados por la depreciación relativa de sus monedas (el dólar perdió 4% de su valor desde la última colecta de fondos y el yen 13%).
Fuente cercana a los negociadores