Equipos de rescate de varios países seguían buscando hoy el avión de la aerolínea Malaysia Airlines desaparecido hace 12 horas con 239 personas a bordo y que, según fuentes vientamitas, se estrelló cerca de la costa de este país.
Hasta el lugar se desplazaron aviones y barcos procedentes de China, Vietnam, Malasia, Singapur y Filipinas para participar en las tareas de rescate.
Aviones vietnamitas detectaron dos manchas de petróleo «sospechosas» de varios kilómetros ante la costa de ese país, una a 150 kilómetros de la isla de Tho Chu y la otra a 190 kilómetros del cabo Ca Mau, explicó a dpa el viceministro de Transportes vietnamita, Pham Quy Tieu.
Esta mañana, el jefe de los organismos de rescate de Vietnam, el teniente general Pham Hoai Giang, informó que el contacto con el avión siniestrado se interrumpió un minuto antes de que entrara al espacio aéreo vietnamita. «Puedo confirmar que la máquina se estrelló, ya no está desaparecida», dijo el oficial al diario «VTC News».
El lugar del accidente se encuentra frente a la isla de Tho Chu. El contacto con el Boeing 777-200 se había perdido dos horas después de haber despegado de Kuala Lumpur. El avión partió de la capital malasia a las 0:41 hora local (16:41 GMT) con destino a Pekín.
El gobierno de Malasia y la compañía propietaria del avión siguen sin confirmar el accidente, admitiendo únicamente que siguen sin tener contacto con el aparato, 12 horas después de que su señal desapareciera de los radares.
El ministro de Transporte de Malasia, Hishammudin Hussen, afirmó que necesitan verificar la información aportada por las autoridades vietnamitas. Hasta el momento se desconocen las causas del accidente.
«En la región en la que despareció el aparato no se había alertado de circunstancias meteorológicas inusuales en ese momento», dijo a dpa el viceministro de Transporte vietnamita, Pham Quy Tieu.
Según explicó en rueda de prensa el CEO de Malaysia Airlines, Ahmad Jauhari Yahya, no hubo señales de que el avión tuviera problemas. El capitán de vuelo era un experimentado piloto con más de 30 años de servicio, explicó. La última vez que tuvieron contacto con el avión, éste se encontraba 222 kilómetros al este de la ciudad malasia de Kota Baru.
«Contactamos a las autoridades malasias y vietnamitas porque se trata de la frontera del espacio aéreo de Malasia y Vietnam», explicó Jauhari Yahya.
«La aerolínea centra sus esfuerzos en trabajar con las autoridades y servicios de emergencia y en movilizar todo su apoyo», afirmó Jauhari Yahya. «Nuestros prensamientos y oraciones están con todos los pasajeros y miembros de la tripulación afectadas y con sus familias», añadió.
En el vuelo MH370 viajaban 227 pasajeros, entre ellos dos bebés, y 12 tripulantes.
Las personas a bordo proceden de 13 países, informó desde Kuala Lumpur Jauhari Yahya, precisando que 153 de ellas son ciudadanos chinos, 38 malasios, cuatro estadounidenses, tres franceses, así como una persona de nacionalidad holandesa y otra austríaca.
El equipo de rescate filipino está rastreando las zonas marítimas cercanas a la provincia de Palawan, informó el portavoz militar Ramón Zagala. Según el portavoz del Ministerio de Defensa filipino, Peter Paul Gálvez, las tareas de rescate se están llevando a cabo bajo la «posibilidad o asunción de que el vuelo podría haberse salido de su ruta».
El presidente y el primer ministro chinos, Xi Jinping y Li Kequiang, pidieron a las autoridades aéreas y de transporte del país que intensifiquen su comunicación con las autoridades de otros países. Además, el viceministro de Exteriores chino, Xie Hangsheng, se reunió en Pekín con representantes de alto rango de las embajadas de Vietnam y Malasia.
En China surgieron además críticas respecto a la política de información de Malasyan Airlines tras la desaparición del avión. El experto en derecho aéreo Zhan Qihuai criticó, en declaraciones a la agencia Xinhua, que la compañía no declarase como desaparecido el avión hasta cinco horas después de que se perdiera el contacto. Según la práctica internacional, lo normal es hacer pública la información en cuanto se pierde el contacto.
Otro experto se mostró sorprendido ante el hecho de que ni la caja negra ni otros aparatos del avión enviasen ninguna señal, informó Xinhua.
Las autoridades aéreas chinas instaron a la compañía Malasyan Airlines a prestar el apoyo que en estos momentos necesitan los familiares de las personas que iban a bordo del avión. Entre las familias que fueron llevabas a un hotel cercano al aeropuerto de Pekín reinaba el desconcierto y la rabia contra la compañía, que según su opinión no estaba proporcionando suficiente información.
Equipos de psicólogos atienden a los familiares tanto en el aeropuerto de Pekín como en el de Kuala Lumpur. En Malasia circulan en Twitter fotos que habrían hecho algunos de los pasajeros poco antes de despegar.
Por su parte, el fabricante de aviones Boeing creó un grupo de expertos para ayudar en el esclarecimiento del accidente, informó la propia empresa estadounidense en su página web. «Transmitimos nuestras más profundas condolencias a las familias de las personas que viajaban a bordo», puede leerse en el sitio de Internet.
Malaysia Airlines es la aerolínea nacional de Malasia y está considerada una compañía segura. Vuela con aviones de Boeing y Airbus en los que cada día lleva a unos 37.000 pasajeros a 80 destinos dentro y fuera del país.