Tras la emoción del principio, cuando acababa de saber que era nominada al premio más deseado de Hollywood, el Oscar a la mejor actriz, Sandra Bullock ha puesto los pies en la tierra. A sus 45 años, y tras protagonizar The Blind Side, siente que su carrera ya ha sido lo suficientemente reconocida tras hacerse con el Globo de Oro y el premio del Sindicato de Actores (SAG).

«Claro que no voy a ganar el Oscar», declaró a la revista People el fin de semana, durante el Festival de Cine de Santa Bárbara. «Nueve de cada diez veces adivino quién se lo llevará. Y ya sé quién será este año… no lo diré ahora, pero acierto nueve de diez veces».

Y es que, al parecer, los premios que ya ha logrado con esta pelí­cula le quitan a la actriz los nervios y la ansiedad. «Tengo que decir que las que estamos nominadas en esta categorí­a no nos preocupamos por quién vaya a ganar».

«Alguna de nosotras lo hará, y el resto estaremos felices por quien quiera que sea. Ya estamos felices de estar nominadas y nos encanta la compañí­a que tenemos», dice refiriéndose a Meryl Streep, Hellen Mirren y las novatas Carey Mulligan y Gabourey Sidibe, a pesar de que en Hollywood las apuestas se amontonan junto a su nombre y al de Streep.

«Soy muy mala aceptando los cumplidos y piropos», confiesa la actriz, que paradójicamente este año también ostenta una nominación al Razzy de peor actriz. «Se me da mejor admitiendo errores o las malas crí­ticas que las buenas… Así­ que estoy intentando simplemente disfrutar el momento».