El brote de gripe porcina que aumenta en forma exponencial en Gran Bretaña podría extenderse pronto al resto de Europa, advirtieron funcionarios europeos de salud.
La temporada anual de gripe azotó el Reino Unido más temprano esta temporada, con un fuerte repunte de casos el mes pasado. La tasa de enfermos casi se duplica cada semana.
La cepa predominante es la de gripe porcina, responsable de la pandemia de 2009. A diferencia de la mayoría de los virus de la gripe, el de la variante porcina afecta en especial a los menores de 65 años y muchas de sus víctimas son jóvenes previamente sanos, sin problemas de fondo.
En Gran Bretaña, la escasez de vacunas obliga a las autoridades a usar las remanentes del año pasado. Algunos hospitales cancelaron operaciones no urgentes para atender a los pacientes de gripe porcina.
Europa debería prestar atención a lo que ocurre en el país, avisaron las autoridades de salud.
«Lo que empieza en Europa occidental tiende a moverse hacia el este», dijo Angus Nicoll, director de coordinación de gripe para el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades. «Probablemente el mismo patrón avanzará hacia el resto de Europa, aunque simplemente no sabemos si el impacto en los hospitales será tan alto».
Nicoll dijo que es probable que algunos países con tasas de vacunación particularmente altas %u2014Finlandia, Noruega, Oslo y Suecia%u2014 eviten una ola severa de gripe. Otros como Francia o Alemania deberían reforzar sus programas de vacunación y preparar a los hospitales para una inminente ola de casos.
La semana pasada, hubo 99 casos de gripe porcina por cada 100.000 personas en Gran Bretaña, lo que representa una reducción de los 124 casos por cada 100.000 personas registrados en diciembre, según datos del Colegio Real de Médicos Generales.
Casi 800 personas con gripe reciben tratamiento en unidades de cuidados intensivos y 50 personas han muerto. Casi todas las muertes se dieron en personas que no habían sido vacunadas.
Ian Jones, un experto de la Universidad de Reading, dijo que las cifras en el país son más altas que las típicas durante temporadas de gripe, pero que no llegan a niveles de epidemia.
Los síntomas de la gripe porcina incluyen fiebre, diarrea, dolores musculares y de garganta. La mayoría de la gente se recupera sin necesitar tratamiento médico.