El Banco Central de Brasil redujo su proyección de crecimiento económico para este año a 2,5%, por debajo del 2,7% previsto anteriormente, según el informe trimestral de inflación divulgado ayer.
El informe destacó que, pese a la expansión de 1,5% en el producto interno bruto del segundo semestre, que superó las expectativas de los analistas y el gobierno, persisten amenazas que reducirán el crecimiento en el tercero y cuarto trimestres, principalmente a causa de la presión inflacionaria.
«Tasas de inflación elevadas generan distorsiones que conducen a aumentos de los riesgos y deprimen las inversiones», señaló el informe. «Tasas de inflación elevadas sustraen el poder de compra de salarios y de transferencias con repercusiones negativas sobre la confianza y el consumo de las familias».
Según el informe de inflación anterior, de junio, la economía crecería 2,7%, un monto inferior al que 3,1% proyectado para 2013 en el documento de marzo.
La economía brasileña registró una débil expansión de 0,9% en 2012, y el gobierno esperaba un crecimiento de 4% para este año.
Sin embargo, la presión inflacionaria y un escenario internacional adverso cambiaron las previsiones.
El informe del Banco Central destacó que «los riesgos para la estabilidad financiera global permanecen elevados», con perspectivas de una actividad económica «moderada» en el escenario internacional, con débil crecimiento en las economía industrializadas.
Pese a ello, el ministro de Hacienda Guido Mantega consideró que podría haber margen para un poco más de crecimiento, gracias a la expansión de 1,5% en el segundo trimestre.
«Como hubo un buen resultado en el segundo trimestre, puede ser que consigamos un poco más, he tenido indicaciones de que la situación económica está mejorando gradualmente», declaró Mantega a periodistas en Sao Paulo. Calculó que el crecimiento podría ser de entre 2,5% y 3%.
Consideró que con una mejora gradual en la coyuntura económica internacional, la situación en Brasil será más positiva en 2014 porque la recuperación en los mercados de países avanzados permitirá aumentar las exportaciones brasileñas.
En materia inflacionaria, el Banco Central proyectó una tasa de 5,8% para el año, encima del centro de la meta de 4,5%. Tal meta tiene un margen de variación de dos puntos porcentuales, por lo que la previsión está dentro del techo de la meta.
Para 2014, el instituto emisor espera una leve reducción a 5,7% de aumento de precios al consumidor. El índice inflacionario cerró 2012 en 5,84%.