Brasil, campeón del mundo de fútbol playa, se adjudicó este domingo el título sudamericano de la especialidad al golear 10-1 a Uruguay en la final del torneo disputado en Montevideo, que clasificó a ambas selecciones para el Mundial de Dubai-2009, conjuntamente con Argentina.
El quinteto auriverde, que ostenta los cetros mundiales de 2006, 2007 y 2008, no dejó resquicio para la duda acerca de su superioridad y desplegó todo el repertorio de lujos, goles y excelsa clase individual de sus jugadores, ante un rival quebrado que no logró inquietar ni un solo instante al favorito.
Tres goles de André, dos de Betinho, dos de Daniel, dos de Benjamín y uno de Camilo, rubricaron la aplastante diferencia con «jogo bonito» incluido.