Así se escribió la historia de Guatemala, engañando a todo el mundo con las historias que se derivaron de las botas y las bayonetas, ya que mientras las primeras se usaban para engañar de quienes eran los actores, las segundas era uno de los actores que engañaba sobre uso de bayonetas.
La iglesia tradicional de Guatemala cuando empezó a verse superada por algunas sectas religiosas, empezó a divulgar historias en todo el mundo sobre desaparecidos o asesinados, unas reales, otras ficticias, cambió prácticamente la comunión, por la política y la economía y dedicó todos sus recursos para crear un ambiente de hostilidad hacia el Ejército de Guatemala, creyendo que con estas acciones las iglesias se llenarían a reventar, pero el efecto fue contrario.
Habrá algunos que no entiendan lo de las botas y las bayonetas, porque no saben que al soldado se le identificaba por las botas de cuero y a la guerrilla, con las botas de hule. Resulta de esta forma de identificar a los actores, que hubo muchos errores, pues cuando la guerrilla incursionaba en un lugar en que sospechaba que había muchos adeptos al ejército, llevaban puestas botas de cuero, de igual forma operaba el ejército, que cuando sospechaba que eran favorables a la guerrilla, entornes incursionaba con botas de hule. Siendo el engaño el arma principal de uno y otro lado, no creo que nadie sepa la verdad, salvo el que haya participado en el hecho.
Viendo que la guerra se perdía, al igual que cada vez se perdían más feligreses, quiso esta iglesia tradicional, tratar de dar una estocada final y empezó a colectar testimonios de personas con el ofrecimiento de que a los familiares de los que habían sido asesinados por el ejército, se les daría una compensación económica, y allí empezó un señor Gutiérrez con monseñor Gerardi, a escribir la famosa historia del conflicto armado, Gutiérrez el cerebro y Gerardi la pantalla.
Yo no he oído que se haya compensado económicamente a soldados que perdieron la vida durante el conflicto armado, que su desgracia fue que no usaban botas de hule y que sus fusiles Galil eran de inferior calidad de los fusiles que portaban los que usaban botas de hule. A estos famosos fusiles Galil la iglesia tradicional le hizo una modificación que solo estaba en la mente de ellos, pues en las iglesias de Estados Unidos que tuve la oportunidad de oír sermones dominicales, lo describían como un fusil con bayoneta y que en ellas los soldados paseaban clavadas las cabezas de niños. Yo estoy seguro que con lo que se ha dicho y que se ha escrito los guatemaltecos desconocen más del 80%% de la verdadera historia de lo que sucedió durante el conflicto armado, por ejemplo, desconocen que Rodrigo Asturias le dio el tiro de gracia a varios oficiales heridos en una montaña de Sololá, que las campanas de las iglesias repicaban para prevenir a la guerrilla de la presencia del ejército, que la iglesia con las famosas bombas voladoras prevenían a las poblaciones vecinas de que las tropas se movían hacia ese lugar.
Cuando se dieron cuenta que todo estaba perdido, que era imposible ganar en el campo militar, se les ocurrió el famoso REHMI para que el triunfador quedara completamente desacreditado.