El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y las ONG que luchan contra las bombas de racimo esperan que la entrada en vigencia de la Convención de Oslo el domingo obligue a las grandes potencias militares a renunciar a su uso.
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y las ONG que luchan contra las bombas de racimo esperan que la entrada en vigencia de la Convención de Oslo el domingo obligue a las grandes potencias militares a renunciar a su uso.