Cuando sólo faltan dos meses para los Juegos Olímpicos de Londres, el jamaiquino Usain Bolt está moderando su ritmo.
Pero sólo fuera de la pista.
Aunque aún tiene sólo 25 años, el triple campeón olímpico está percatándose de que ya no cuenta con los niveles de energía de los que solía gozar. Ha suspendido las desveladas y ahora busca acostarse a las 11 de la noche.
«Cuando envejeces es un hecho que ya no tienes la misma energía que antes», dijo Bolt el viernes en una entrevista con The Associated Press. «Podía permanecer despierto toda la noche y (luego) irme a correr, pero ahora no es lo mismo. Necesitas descanso suficiente, y para mí eso está bien porque aprendes. Vives y aprendes».
El velocista es conocido por su actitud relajada y las travesuras que hace por simple diversión, pero se toma muy en serio lo que realmente importa: defender sus tres medallas de oro olímpicas en Londres en agosto.
«Tienes que tomártelo en serio», señaló. «Tengo una meta. Quiero ser una leyenda. Y estos Juegos Olímpicos, pienso yo, serán en los cuales se podrá lograrlo porque son en Londres, es muy céntrico, es donde todo el mundo está mirando».
Los aficionados al atletismo miran cada carrera de Bolt en estos días, y no se sintieron muy impresionados con su arranque en la temporada europea el mes pasado. Bolt cronometró un tiempo francamente lento —para sus estándares— de 10.04 al ganar los 100 metros en Ostrava, República Checa.
Sin embargo, el ritmo candente del plusmarquista mundial volvió el jueves, cuando electrizó la Gala de Oro en Roma con 9.76, el mejor tiempo de la temporada.
«¿Que si le estoy quitando la vista al balón? Fue sólo una de esas cosas» que pasan, recordó Bolt en un hotel en Londres mientras vestía una camiseta con la imagen del músico jamaiquino Bob Marley. «Llegué a Europa y no tuve descanso suficiente y fue un día libre» (en Ostrava).
«Ahora que sé que si no duermo lo suficiente en Europa… estaré fuera de forma, me alegra que haya ocurrido cuando ocurrió», dijo Bolt. «Yo no lo llamaría una irregularidad momentánea, sino una experiencia de aprendizaje».
Y lo que aprendió se resume a que hay que dormir bien.
«Trato de no dormir durante el día; realmente trato de mantenerme despierto porque ése es el problema», afirmó. «Normalmente cuando sentía que quería dormir me echaba a dormir a la mitad del día», y al llegar la noche estaba «bien despierto».
«Así, ahora trato de mantenerme despierto —bien despierto— hasta probablemente las 11, me doy una ducha y me voy a acostar», agregó.
Bolt se posicionó como un superastro mundial en los Juegos Olímpicos de Beijing de 2008 al ganar los títulos de los 100 y los 200 metros con tiempos récord, y también le ayudó a Jamaica a ganar el oro y establecer otro récord del mundo en los 400 metros de relevos.