Nuevas inyecciones de dinero fresco del Banco Central Europeo (BCE) y del Banco de Japón contribuyeron el lunes a apaciguar las tensiones de las Bolsas europeas y asiáticas, tras una semana calamitosa a raíz de la crisis de los créditos inmobiliarios de riesgo en Estados Unidos.
El índice CAC 40 de la Bolsa de París, que perdió 3,13% el viernes, avanzaba 1,36% en terreno positivo el lunes al mediodía. La Bolsa de Londres subía un 1,61% y Francfort un 1,15% tras retrocesos de 3,71% y 1,48% respectivamente el viernes.
Las Bolsas asiáticas también se recuperaron el lunes tras la intervención del Banco de Japón, pero los inversores permanecen prudentes y buscan evaluar la amplitud de las dificultades en el mercado de crédito.
En la Bolsa de Tokio, el índice Nikkei de los 225 principales valores terminó la sesión en leve alza de 0,21%, a 16.800,05 puntos, no lejos de su menor nivel en casi cinco meses.
El banco de inversiones estadounidense Morgan Stanley recomendó a los compradores regresar al mercado. El lunes levantó su recomendación de dar más peso a las acciones europeas, contra «neutro» anteriormente, al destacar que las dificultades en los mercados financieros están desde ahora correctamente evaluadas en las cotizaciones y las previsiones.
«Las consecuencias en el crecimiento económico centrarán la atención en los próximos trimestres. Pero debemos comprar en momentos en que la incertidumbre es la mayor, y en nuestra opinión, ese momento se acerca», estimó Morgan Stanley.
La bolsa de Hong Kong también cerró en terreno positivo: 0,45% a 21.891,10 puntos, tras las huellas de Shanghai, que terminó con un nuevo récord de cierre a 4.820,06 puntos ( 1,48%).
En Seúl, el índice Kospi subió un 1,1% a 1.849,26 puntos, impulsado por los comentarios del ministro de Finanzas surcoreano, quien aseguró que el gobierno estaba dispuesto, si era necesario, a inyectar liquidez en el sistema bancario a fin de prevenir una degradación de las condiciones crediticias.
Sydney también terminó en verde ( 1,3%), al igual que Taipei ( 0,09%).
Las ganancias eran de 0,77% en Bombay a mediados de la sesión.
Las Bolsas mundiales se derrumbaron el viernes a raíz de la crisis de los préstamos inmobiliarios de riesgo («subprime») en Estados Unidos, que dio nacimiento a un temor mundial de ajuste del crédito y desaceleración económica.
Para tranquilizar a los mercados financieros, los bancos centrales de Europa, Estados Unidos y Japón inyectaron masivamente liquideces al flujo monetario mundial desde el jueves.
El lunes el BCE, que inyectó unos 156.000 millones de euros el jueves y viernes pasados, anunció un nuevo suministro de 47.660 millones de euros al flujo monetario, al tiempo que señaló que «la situación monetaria se estabiliza».
Más temprano, el Banco de Japón había anunciado que pondría a disposición de los bancos 600.000 millones de yenes adicionales (5.070 millones de dólares).
«El hecho de que los bancos centrales cooperen para suministrar liquideces (a los mercados) aporta un sentimiento de alivio a los operadores», estimó Hideaki Inue, analista de Mitsubishi UFJ Trust and Banking Corp.
«Pero anunciar el fin de la crisis de los créditos inmobiliarios de riesgo aún es prematuro. Esta crisis podría durar varios meses», señaló Joseph Yusef, de Macquarie Wealth Management.
Los corredores opinan que los inversores se beneficiaron del derrumbe bursátil del viernes para llenar sus bolsillos con acciones baratas, aunque siguen prudentes y aún se interrogan sobre la amplitud de las pérdidas de las instituciones financieras expuestas a esta crisis.