La empresa boliviano-argentina Catler Uniservice, involucrada en un caso de corrupción petrolera, ganó el año pasado un contrato para construir una vital planta separadora de gas en Bolivia por 86 millones de dólares, a pesar de haber declarado un capital de operaciones de sólo de 7 mil dólares.
La viceministra de Lucha Contra la Corrupción, Nardy Suxo, explicó que su oficina investiga a la empresa que tiene plazo hasta junio próximo para construir una planta de gas licuado de petróleo y gasolina en el departamento de Santa Cruz, vital para solucionar la escasez de estos productos en el país.
En julio de 2008 el ahora ex presidente de YPFB, Santos Ramírez, firmó un contrato con el representante legal de la empresa Catler Uniservice, Agustín Milano, en presencia del presidente Morales, para la construcción de una planta separadora de líquidos de gas natural.
El costo de la obra es de 86 millones de dólares para producir diariamente 260 toneladas de gas licuado de petróleo y 460 barriles de gasolina natural y debe ejecutarse en un año calendario. Hasta la fecha no existe ninguna construcción en la zona de Río Grande (Santa Cruz), a unos 850 km al este de La Paz, de acuerdo a investigaciones de prensa.