La reina Isabel de Inglaterra, de 81 años, y Felipe de Edimburgo, de 86, celebrarán el lunes su aniversario de diamante con una ceremonia privada en la Abadía de Westminster, antes de viajar rumbo a la isla de Malta, donde hace 60 años pasaron su luna de miel.
Isabel II es «la primera monarca del Reino Unido que celebra 60 años de matrimonio», afirmó el palacio de Buckingham.
Este aniversario de la boda de Isabel, que era una princesa de 21 años cuando se casó con Felipe Mountbatten, entonces de 26, no será ocasión de festejos como los organizados hace 60 años, cuando el país se volcó alegremente a las calles, también para olvidar la cruel guerra de la que acababa de salir.
La pareja real estará acompañada el lunes sólo por unos selectos invitados, y la ceremonia en la Abadía de Westminster, donde el 20 de noviembre de 1947 la joven princesa subió al altar del brazo de su padre, Jorge VI, será muy discreta.
Está previsto que el nieto de la Reina, el príncipe Guillermo, hijo de Carlos, heredero del trono británico, y de la fallecida Diana de Gales, haga una lectura durante la ceremonia, que será transmitida en vivo por la radiocadena británica BBC.
Luego la pareja real inaugurará, en una plaza frente al Parlamento, un recorrido a pie que conectará las principales atracciones turísticas de la capital británica.
La monarca y su esposo harán luego el mismo trayecto que hicieron hace e seis décadas, cuando partieron a Malta para pasar su luna de miel, llevándose también al perro preferido de Isabel.
Se sabe que la Reina, que se casó muy enamorada, guarda un buen recuerdo de esa isla.
Felipe era un primo lejano de Isabel, a quien la princesa conoció en el verano de 1939 y del que, según cuentan algunas biografías, quedó inmediatamente enamorada.
Felipe «es el hombre de quien la princesa Isabel se enamoró en su primer encuentro», escribió Sir John Wheeler-Bennett, el biógrafo oficial de su padre, el rey Jorge VI.
En ocasión de este aniversario, el palacio de Buckingham consagró una muestra en la que exhibe el vestido nupcial de color marfil de Isabel, bordado con 10.000 perlas y cristales, y el de Felipe.
Expone asimismo algunos de los 2.500 regalos que recibió la pareja, entre ellos joyas incrustadas con diamantes, zafiros y rubíes, así como platería, vajilla y hasta un fonógrafo y una máquina de coser Singer.
Se presentan también películas hechas por aficionados y profesonales, el 20 de noviembre de 1947, donde se ve a la feliz princesa, que unos años después se convertiría en la monarca británica y en un bastión de estabilidad y tradición.