Emily Blunt no supo qué era más aterrador, si combatir extraterrestres con Tom Cruise o cantar frente a Meryl Streep y Johnny Depp. Ambos papeles le hicieron sentir maripositas en el estómago, y precisamente por eso los aceptó.
«Me gusta preguntarme, ‘¿Cómo diablos voy a hacer esto?»’, dijo la actriz de 31 años mientras daba sorbos a un café con leche helado en una cafetería del artístico barrio de Los Ángeles Los Feliz.
En su más reciente película, «Edge of Tomorrow», la versátil actriz británica blande grandes armas como Rita Vrataski, quien tiene la tarea de transformar al personaje de Cruise de un asustado chupatintas a un guerrero dotado.
«En estos géneros dominados por los hombres, usualmente es la mujer la que toma la mano del tipo que la guía en medio de explosiones, y yo quería ser ese personaje», dijo Blunt. «Esta era la idea extrema de lo que jamás pensé que querría hacer».
La actriz se inició en el teatro de Londres, donde debutó profesionalmente en 2002 junto a Judi Dench. Su salto a la gran pantalla se produjo cuatro años después en «The Devil Wears Prada» («El diablo viste de Prada»), en la que interpretó a la fría asistente de una revista que estaba a «sólo un virus estomacal» de su peso deseado. Desde entonces ha aparecido en más de 20 películas.
Pero ninguna la preparó para ser una estrella de acción. Blunt tuvo que someterse a tres meses de riguroso entrenamiento en artes marciales y manejo de armas. También la ayudó trabajar con Cruise, famoso por hacer sus propias escenas peligrosas.
«No quise que él fuera el único fanfarroneándose», dijo entre risas. Blunt debió usar un chaleco con peso para prepararse para el traje de casi 40 kilos (85 libras), el «Exo-Suit», que luce en el filme. Casi se le rompió la nariz en el proceso y podría haberse dañado permanentemente un dedo pulgar.
El entrenamiento la ayudó a convertirse en Rita, pero también a conocerse mejor. «Creo que me endureció muchísimo», dijo Blunt, «porque ahora sé de lo que soy capaz». El director Doug Liman dijo que el personaje de Blunt es «la heroína de la película».
«La actuación de Emily es aún más impresionante cuando uno se detiene a ver que ella domina la pantalla por sobre el más grande astro del cine del mundo, cuyo personaje también tiene un superpoder», añadió.
El próximo papel de Blunt también requirió de valentía, pero para algo muy distinto: cantar. Blunt, Streep y Depp protagonizan el oscuro cuento de hadas musical «Into the Woods», una adaptación de la obra de Stephen Sondheim dirigida por Rob Marshall que se estrena el Día de Navidad. La actriz tuvo que trabajar con un profesor de canto.
Además de entrenarse, Blunt recurrió a su amor por la gente para nutrir los personajes que encarna. Una ávida lectora, encuentra que descubrir a personajes en papel la inspira a la hora de crearlos para la pantalla.
«Cuando decido interpretar un personaje, es porque me encanta ese latido humano que tiene y me identifico con él», dijo.
Desconectarse de Hollywood es parte del proceso. Blunt se recarga en casa con su esposo, el actor John Krasinski, y su hija de tres meses y medio, Hazel. A la pareja le gusta entretener, y Blunt cocina platos italianos así como algunas especialidades de su tierra («La comida inglesa es subestimada», dijo).
Esa fuente de amor y estabilidad fuera de la pantalla le permiten sortear los caprichos de Hollywood y seguir las mariposas cuando se presenta un papel desafiante.
«Es un negocio tan incierto», dijo. «Uno no sabe cuándo volverá a trabajar, a quién va a interpretar, con quién, así que creo que uno tiene que afrontar cada día con gran esperanza».