El funcionamiento total de los aparatos para bloqueos de llamadas telefónicas, desde las prisiones, tuvo un nuevo retraso, el SP prevé su funcionamiento «óptimo» hasta finales de abril.

El Sistema Penitenciario (SP) asegura que los aparatos están montados y funcionando en un 95%, sin embargo, detalles técnicos y administrativos no permiten su utilización total.

Mientras los aparatos no son implementados, los ilí­citos desde las sedes carcelarias continúan según los datos de la Policí­a Nacional Civil y el Ministerio Público (MP).

La Granja Penal de Cantel, Quetzaltenango, es una de las prisiones que más delitos coordina: la Fiscalí­a Contra Secuestros y Extorsiones del MP detectó recientemente a los supuestos cabecillas de una banda que se dedica a extorsionar desde esa cárcel.

Juan Luis Lux López y Selvin Aldemar Maldonado ílvarez cumplen condena en esa prisión por los delitos de robo, tenencia ilegal de municiones y exacciones intimidatorias y son ahora sindicados de liderar un grupo de extorsionistas que delinquen en esa región.

Por la extorsión a un empresario de aquella región fueron capturados Marí­a Timoteo Chávez y Gustavo Xalcot quien recogió Q70 mil, producto de la extorsión, y lo llevó hasta la citada prisión donde fue descubierto por la PNC.

PREVENTIVO

Rudy Esquivel, portavoz del SP, informó que esa entidad está consciente de la incidencia que existe en delitos que son coordinados desde las diferentes prisiones del paí­s y que en ese marco se están tomando medidas y proyectos como los citados aparatos.

«Este es uno de los proyectos de mayor importancia en cuanto seguridad preventiva y se trata de limitar las llamadas desde dentro de los centros penitenciarios y se espera que a finales de abril esté funcionando al ciento por ciento y lo mejor posible», indicó Esquivel.

El entrevistado indicó que actualmente se están haciendo pruebas y que los aparatos funcionan en un 95%, además, explicó que «se busca un mecanismo que regule la señal análoga y digital pero que no cause daños a la población fuera que se limite del centro», explicó.

Esquivel dijo finalmente que también falta cancelar un pago del 5% del monto total de la inversión y que esa es una de las razones que también mantiene varado el proyecto.

PROYECTO

Los aparatos tuvieron un costo total de Q21 millones, sin embargo, el SP sólo ha cancelado Q17.8 millones. En total debe Q3.2 millones aproximadamente, una parte de esa suma será cancelada cuando los aparatos estén en funcionamiento.

Los artefactos serán instalados en 11 de los 19 centros carcelarios que existen en el paí­s.