Los líderes del Cuarteto para Oriente Medio se reúnen hoy en Lisboa para intentar reactivar el proceso de paz en esa región y definir la hoja de ruta de su nuevo emisario, el ex primer ministro británico Tony Blair, encargado de asistir a los palestinos en la creación de su Estado.
La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, el Alto Representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Javier Solana, y el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, asistirán a las conversaciones de Lisboa.
No hay «objetivo más importante que tener un Estado palestino viable» y ese es el mandato «claramente definido» de Blair, afirmó Rice a los periodistas en el avión que la llevaba a Lisboa.
«Hay negociaciones políticas que por diversas razones Estados Unidos está decidido a dirigir, en coordinación con el Cuarteto», explicó la secretaria de Estado.
Rice elogió a Blair, afirmando que se trata «de una personalidad histórica muy competente y respetada en el mundo».
El presidente norteamericano, George W. Bush, lanzó el lunes un llamado a una reunión internacional sobre Oriente Medio para «hacer más por la paz». Rice deberá precisar los objetivos a sus interlocutores.
Tony Blair, el nuevo emisario especial del Cuarteto después de su renuncia a la jefatura del gobierno británico, el 27 de junio, asume esta responsabilidad en el marco de un nuevo impulso norteamericano para la paz.
Sin embargo, diez países del sur de Europa se pronunciaron a favor de una ampliación de su papel que lo conduciría a facilitar «negociaciones sin condiciones previas sobre el estatuto final» de los territorios palestinos entre israelíes y palestinos.
Los ministros de Relaciones Exteriores de esos diez países preconizan fundamentalmente crear allí «una fuerza internacional sólida» para acompañar un acuerdo de paz, una iniciativa considerada «prematura» por Estados Unidos.
Varios países árabes y la Autoridad Palestina también manifestaron el deseo de que la reunión de Lisboa permita llevar a la mesa de negociaciones a las diversas partes y crear una nueva dinámica de paz.
El canciller egipcio, Ahmed Abul Gheit, de visita en Lisboa durante los últimos días, preconizó un diálogo entre la Autoridad Palestina y los islamistas del Hamas, que tomaron el control de la franja de Gaza, pero que son totalmente excluidos por Estados Unidos, que los considera terroristas.
«Lo importante es dar un nuevo impulso al proceso. (…) Por eso, hay que hacer dos cosas importantes: reactivar la economía palestina» por una parte y las «negociaciones políticas» entre las dos partes por la otra, explicó Gheit, al tiempo que manifestaba su satisfacción ante el llamado de Bush a una reunión internacional.
Luego de una reunión con Blair, el primer ministro italiano, Romano Prodi, y su canciller Massimo D’Alema, expresaron el miércoles en Roma el deseo de Italia de que se logre «un horizonte político que otorgue nuevas perspectivas de negociaciones» a Oriente Medio.
Poco antes, Prodi se había pronunciado en favor de un diálogo «con todas las partes involucradas», incluyendo al Hamas.
Según Solana, con el cual se reunió el lunes, Blair debería tener un papel fundamental en ayudar a los palestinos a organizar sus instituciones, para que la solución de los dos Estados se convierta en una realidad.
Solana también expresó su agrado ante la iniciativa de Bush, afirmando que la misma contenía elementos nunca antes mencionados por Estados Unidos sobre la solución de dos Estados y el compromiso de ayudar a los palestinos política y económicamente.
Ahmed Abul Gheit, canciller de Egipto.