La Biblioteca Nacional de Costa Rica celebra hoy el 120 aniversario de su fundación renovándose con varios proyectos, entre ellos la construcción de un módulo especial para preservar sus más antiguas joyas, como una historia del Imperio Romano de 1548 y un periódico nacional de 1831.
Una veintena de personas trabaja a toda velocidad en el sótano del edificio que alberga la biblioteca, en una transitada calle del centro de San José, para tener lista la obra antes de diciembre próximo.
«Hay una gran cantidad de libros antiguos y colecciones únicas y valiosas que se estaban deteriorando por el polvo y el humo de los carros, así que decidimos construir este módulo especial en el sótano, que era un espacio desperdiciado», contó la directora de bibliotecas del Ministerio de Cultura, Margarita Rojas.
Las ventanas del piso, que cubre buena parte de una cuadra, han sido selladas con vidrios especiales; las paredes reciben una capa de pintura grisácea que rechaza la luz y los pisos se refuerzan con lozas de alta resistencia para soportar el peso de los libros y las estanterías especiales en que serán colocados.
En un piso superior, la directora de la Biblioteca Nacional, Yamilette Solano, muestra algunas de las joyas más valiosas que pasarán a este nuevo módulo: una historia en latín del Imperio Romano, impresa en 1548; una edición de la Biblia -también en latín- impresa en París en 1702; una colección de leyes costarricenses de 1858, y varias colecciones de periódicos antiguos.
El año del 120 aniversario también marcará la digitalización de esta antigua institución costarricense, fundada oficialmente en 1888.
«Nuestro portal en Internet será abierto el 8 de diciembre. Vamos a empezar digitalizando los periódicos oficiales desde el siglo XIX, para poder ponerlos al servicio del público», explicó Rojas.
«Son aproximadamente seis millones y medio de páginas de periódicos que hay que digitalizar, por lo que estamos trabajando muy intensamente para tenerlos listos en la fecha prevista», precisó.
«Con el lanzamiento del portal, se hará una campaña de información para que la gente sepa que existe y que puede usarlo desde su casa», señaló Rojas.
La Biblioteca Nacional de Costa Rica fue abierta al público en 1890 en los altos del mercado de San José, dotada apenas de 4.000 volúmenes rescatados de lo que fuera la primera casa de educación superior del país, la Universidad de Santo Tomás, que había sido clausurada unos años antes.
Actualmente la biblioteca cuenta con 700 mil volúmenes, una cifra que según su directora la coloca en un nivel intermedio entre las mayores del continente, como la chilena, y las más pequeñas con que cuentan, por ejemplo, algunos países centroamericanos.
Entre las actividades conmemorativas del aniversario, este lunes se ofrecerá una conferencia del especialista alemán Stephan Fí¼ssel, que disertará sobre Gutenberg, el impacto de la imprenta y las nuevas tecnologías del libro, incluida la digital.