Ben Bernanke no propuso hoy nuevas medidas de la Reserva Federal para impulsar la economía, e insinuó que el Congreso tendría que actuar para estimular las contrataciones.
En una reunión anual sobre economía en Jackson Hole, el presidente del Banco Central dijo que, aunque las tasas de interés a niveles históricamente bajos promoverán el crecimiento con el tiempo, la débil economía requiere más ayuda en el corto plazo.
De todas formas, Bernanke dijo sentirse optimista de que, a la larga, el mercado laboral y la economía volverán a tener plena salud.
Su discurso fue precedido por la noticia de que la economía estadounidense apenas creció un 1% en el segundo trimestre, y que el ritmo de expansión fue un tímido 0,7% en los primeros seis meses del año.
Empero, la bolsa de valores subió levemente tras las palabras de Bernanke. El promedio industrial del Dow Jones avanzaba cinco puntos, el 0,05%, a 11.155 poco después de las 1500 GMT.
En su discurso, Bernanke dejó abierta la posibilidad de que la Fed adopte nuevas medidas para fortalecer la economía. Agregó que su reunión de septiembre durará dos días en lugar de uno.
El presidente de la Fed insistió en la necesidad de reducir el déficit a largo plazo, pero resaltó que el futuro de la pujanza económica podría peligrar si la contratación laboral y el crecimiento económicos no son apuntalados ahora.
«Los arquitectos de la política fiscal no deberían ignorar la fragilidad de la presente recuperación económica», indicó.
Bernanke criticó además la forma en que el Congreso manejó la ampliación del tope del endeudamiento gubernamental, e insistió que las gestiones afectaron negativamente a la economía, con consecuencias negativas a largo plazo.
El funcionario dio su discurso en momentos en que muchos economistas temen la posibilidad de que Estados Unidos vuelva a caer en breve en una nueva recesión. Uno de los principales motivos es la contracción del gasto consumidor, el precio de la vivienda está por los suelos, los salarios apenas crecen y el endeudamiento de los hogares sigue siendo elevado.
Mercados fluctúan
Los mercados mundiales mostraron nerviosismo hpy en una jornada en la que los inversionistas se mantuvieron a la expectativa de lo que prometerá el Presidente de la Reserva Federal Ben Bernanke y las medidas que se adoptarán para que la economía estadounidense no sufra otra recesión.
Los precios del crudo se cotizaban por debajo de los 85 dólares por barril, mientras que el dólar bajó en sus cotizaciones frente al yen y el euro.
Las acciones europeas se mostraron a la baja en sus primeras transacciones. El referente FTSE 100 de la bolsa británica bajaba 0,9% hasta los 5.086,29 puntos, mientras que el alemán DAX caía 2,1% hasta los 5.466,94 puntos y el francés CAC-40 retrocedía 0.9% hasta las 3.089,88 unidades.
En Asia, el índice Nikkei 225 de la bolsa japonesa tuvo una jornada de mucha volatilidad al fluctuar entre ganancias y pérdidas todo el día antes de cerrar con alza del 0,3% a 8.797,78. Por su parte, el referente Koski de la bolsa surcoreana avanzó 0,8% luego de una mañana volátil y cerró a 1.778,95 puntos.
En tanto, el referente Hang Seng de Hong Kong perdió sus ganancias del comienzo del día y bajó 0,9% hasta los 19.582,88. Otros indicadores bursátiles en Australia, Singapur y Filipinas cerraron a la baja mientras que los títulos en China continental cerraron con resultados mixtos.
Las operaciones mostraron inestabilidad pues los inversionistas prefirieron mantenerse al margen para ver si Bernanke ofrece más apoyo a la economía estadounidense durante su muy esperado discurso en una conferencia de prensa programada para más tarde el viernes en la localidad de Jackson Hole, Wyoming.
La Fed ya había prometido tasas de interés bajas hasta el año 2013. Otros observadores del banco central estadounidense indicaron que la Fed ya llegó al límite de lo que puede hacer esa institución para ayudar a una economía sumida en problemas que la política monetaria no puede resolver —como las altas tasas de desempleo y la enorme deuda gubernamental.