Bendiciones


César Guzmán
cesarguzman@yahoo.com

Bendigo las circunstancias difí­ciles, porque ellas son las manos amorosas que moldean mi carácter, y preparan el terreno en el cual se desarrollará la semilla de mi triunfo glorioso.

Bendigo las jornadas agotadoras, porque ellas son las alas que me elevan hacia las alturas de la grandeza interior, y me transportan por el horizonte del infinito bienestar.

Bendigo las lágrimas de dolor, porque ellas son las estrellas que iluminan mis pasos en la búsqueda de la felicidad, y el mapa celestial que me guí­a en mi ruta hacia la auténtica paz y alegrí­a.

Bendigo los momentos de sufrimiento, porque ellos son los brazos que me mantienen de pie ante el destino, y evitan mi fatal caí­da en el fango del materialismo egoí­sta.

¡Bendita la adversidad, único camino seguro al triunfo!