Bella y embarazada


Nicole Kidman, aclamada por su belleza y por calidad actoral, espera, a sus 40 años, su primer hijo.

La bella, glamorosa y sobre todo talentosa actriz australiana Nicole Kidman espera finalmente su primer hijo biológico, fruto de su unión con el cantante de country nacido en Nueva Zelanda Keith Urban, con quien se casó en junio de 2006, anunció esta semana su agente.


«Nicole Kidman y Keith Urban confirmaron hoy que están esperando un bebé. La pareja está muy feliz», declaró en un comunicado Wendy Day, su agente.

Este será el primer hijo biológico de Nicole Kidman, de 40 años, quien ya tiene otros dos vástagos, Isabella, de 14 años, y Connor, de 12, adoptados cuando la cantante estaba casada con el actor estadounidense Tom Cruise.

El pasado año, la rubia actriz reveló que habí­a tenido un embarazo extrauterino y reconoció que tuvo dificultades para quedar embarazada durante su matrimonio con Cruise, que duró 10 años.

Kidman, que desde hací­a tiempo mostraba su deseo de quedar embarazada, declaró en noviembre a una revista femenina: «Hay que dejar que las cosas lleguen por sí­ solas. Será la voluntad de Dios».

Wendy Day declaró el martes que la propia actriz le habí­a confirmado por teléfono que las informaciones aparecidas en la prensa eran ciertas.

Nicole Kidman renunció recientemente a rodar la pelí­cula «The Reader» (El lector), del director británico Stephen Daldry, cuyo rodaje iba a comenzar este mes y debí­a realizarse en Berlí­n y Nueva York.

Su papel será confiado a la actriz británica Kate Winslet, la protagonista de «Titanic», afirmó por su lado el diario alemán Berliner Morgenpost, citando al guionista y autor de la obra, Bernhard Schlink.

Un portavoz de los estudios Babelsberg, en Berlí­n, confirmó que el rodaje iba a comenzar de todos modos, como estaba previsto, en enero.

El embarazo de Nicole Kidman es el ápice de un periodo fasto de su vida, que empezó en 2002, cuando ganó el Oscar de la mejor actriz por «The Hours» (Las horas), pelí­cula en la que representó de modo intenso y conmovedor a la escritora británica Virginia Woolf en el periodo previo a su suicidio.

Es un periodo también en el que filmó sin descanso, al tiempo que se convertí­a en la nueva representate del mundialmente célebre perfume Chanel Nº 5, situación que la llevó a abrir, y ganar, en diciembre, un proceso al diario británico Daily Telegraph, que habí­a insinuado que era desleal hacia Chanel.

El diario se excusó por haber escrito sin fundamento en su rúbrica «indiscreciones» que la actriz promovió de la pelí­cula «En el crucero de los mundos: la brújula de oro» exhibiendo un frasco del perfume Jo Malone.

Nicole Kidman «se perfumaba constantemente» con esta fragancia, publicitando de hecho a un producto rival del célebre perfume de Chanel, afirmó la publicación, antes de descubrir que esta historia era un invento, por lo cual su abogado, David Price, presentó las excusas debidas.

El juez de la Corte Superior de Londres, John Kelly, afirmó que la estrella habí­a sido perturbada por este asunto, que sugerí­a que ella habí­a actuado de modo deshonesto al violar su contrato con la firma de lujo Chanel.

Además de presentar sus excusas, el Daily Telegraph aceptó pagar una indemnización por daños y perjuicios cuyo monto no fue revelado y que Nicole Kidman ha decidido entregar a un fondo de las Naciones Unidas para la mujer.

Pero como los escándalos no vienen solos, la nota agria para Nicole Kidman la puso, también en diciembre, el diario del Vaticano, L»Osservatore Romano, que criticó duramente «La brújula de oro», una pelí­cula para niños, acusándola de ir contra el espí­ritu de la Navidad.

La pelí­cula es una adaptación de «Las luces del norte», el primer libro del autor británico Philip Pullman, cuya trilogí­a fantástica «His Dark Materials» ha sido acusada por grupos cristianos de ser antireligiosa.

Según L»Osservatore Romano, Pullman aboga por «una ideologí­a completamente atea, enemiga de todas las religiones, tradicionales e institucionales, y del cristianismo y el catolicismo en particular.»