BCE mantiene tasa de interés


Jean-Claude Trichet, presidente del BCE, indicó que no aumentarí­an su tasa de interés, pero manifestó su preocupación por la situación económica mundial de la actualidad. (AFP / La Hora)

El Banco Central Europeo (BCE) decidió hoy mantener su tasa de interés directriz en 4%, tal como anticipaban una mayorí­a de analistas, anunció uno de sus portavoces.


Poco antes, el Banco de Inglaterra adoptó una decisión similar al mantener en 5,75% su principal tasa de interés.

El presidente del BCE, el francés Jean Claude Trichet, celebrará una conferencia de prensa a las 7:30 (hora de Guatemala) para explicar la decisión del consejo de gobernadores, y según esperan los mercados, dar indicios sobre la futura polí­tica monetaria.

Los guardianes del euro se enfrentan a señales contradictorias. Por un lado, aumentaron los riesgos de inflación, atizados por el alza de los precios del petróleo, que rozan los 100 dólares el barril, y por los mayores precios de los productos alimenticios básicos.

En octubre, la inflación registró una elevada tasa de 2,6% interanual, según cifras provisorias de Eurostat, la oficina de estadí­sticas europeas. La meta del BCE es que el alza de los precios al consumo permanezca levemente por debajo de 2% a mediano plazo.

Por otro lado, la crisis crediticia en Estados Unidos, la caí­da del dólar frente al euro y el alza de las cotizaciones del oro negro podrí­an afectar el crecimiento de la Eurozona.

La misión primordial del BCE es combatir las amenazas inflacionistas. Pero un alza de las tasas podrí­a resultar difí­cil de justificar en momentos en que el euro fuerte perjudica las exportaciones industriales, y que la Reserva Federal estadounidense, cuya principal tasa de interés es hoy de sólo 4,5%, dejó abierta la puerta a un nueva baja del precio del crédito.

En septiembre, el BCE aplazó -pero no abandonó, según sus declaraciones- su proyecto de aumentar su tasa directriz por novena vez consecutiva, a raí­z de la tormenta que sacudió a los mercados financieros tras la crisis de los créditos hipotecarios de riesgo en Estados Unidos («subprime»).

Desde diciembre de 2005, la tasa directriz del BCE subió de 2% a 4%.

CAMBIOS MALVENIDOS

Los recientes movimientos del tipo de cambio, marcados por una caí­da frenética del dólar frente al euro, son «fuertes y abruptos» y por ende «malvenidos», declaró el jueves el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet.

Los recientes movimientos en el mercado de cambios son «sin ninguna duda fuertes y abruptos», y eso es siempre «malvenido», declaró Trichet en una conferencia de prensa en Francfort, tras la decisión del BCE de mantener su tasa de interés directriz en 4%.

La posición del grupo de los siete paí­ses más industrializados del mundo, el G7, que considera «indeseables» los «movimientos desordenados» del tipo de cambio, es ahora «más cierta que nunca», insistió.

La moneda única europea subió hasta un récord de 1,4731 dólares el miércoles, tras haber franqueado la barrera de los 1,46 dólares y luego la de los 1,47 dólares en una sola jornada.

INQUIETOS POR INFLACIí“N

El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet, estimó el jueves particularmente preocupante la evolución de la inflación en la Eurozona, que subió un 2,6% interanual en octubre.

«El fuerte aumento de la inflación es un motivo de preocupación particular», subrayó Trichet en una conferencia de prensa en Francfort, tras la decisión del BCE de mantener su tasa de interés directriz en 4%.

Los precios al consumo subieron en octubre a raí­z del petróleo caro y el aumento de los productos alimenticios básicos derivado del alza de las materias primas como el trigo.

El presidente del BCE dijo no obstante que espera una evolución más moderada de los precios durante el 2008.

Del lado de la coyuntura, los «fundamentos de la economí­a permanecen sanos» en la Eurozona, estimó, aunque la volatilidad de los mercados ligada a la crisis del crédito en Estados Unidos eleve la incertidumbre sobre el crecimiento.

Inglaterra mantiene tasas

El Banco de Inglaterra (BoE) decidió hoy mantener en 5,75% su principal tasa de interés por cuarto mes consecutivo, tal como esperaban de forma casi unánime los analistas.

El último cambio en la polí­tica monetaria, un alza de 0,25%, se remonta al 5 de julio pasado, y fue la quinta alza desde el mes de agosto de 2006.

El anuncio impulsó a la libra esterlina a un nuevo máximo frente al dólar en los últimos 26 años, a 2,1088 dólares.

Las minutas de la reunión de hoy serán publicadas el 21 de noviembre, y entonces se desvelarán las posiciones de los nueve miembros que integran el comité de polí­tica monetaria. Durante la reunión del 4 de octubre, un solo miembro se pronunció a favor de un recorte de las tasas y los ocho restantes permanecieron favorables al status quo.

El Banco de Inglaterra posee actualmente una tasa directriz mucho más alta que en la Eurozona (4%) y que en Estados Unidos (4,5%).

La polí­tica monetaria británica tuvo cinco vueltas de tuerca de 0,25% cada una entre agosto de 2006 y julio pasado, lo cual resulta desde hace varios meses en una inflación por debajo del umbral de 2% interanual tolerado por el BoE.

Pero los efectos de la crisis financiera del verano pasado, cuyo efecto completo aún se desconocen, podrí­an afectar en el crecimiento.

Dos cifras publicadas esta semana dan los primeros indicios de una posible desaceleración económica.

El í­ndice PMI de servicios, particularmente vigilado por el BoE, cayó a 53,1 en octubre, su menor nivel en más de cuatro años. La producción industrial retrocedió un 0,6% en septiembre, aunque se esperaba un mantenimiento del status quo.

La decisión del BoE fue anunciada un par de horas antes de que el Banco Central Europeo (BCE) anunciara que mantiene su principal tasa de interés en 4%.