Banco de Guatemala e inflación de precios


Luis_Enrique_Prez_nueva

El Banco de Guatemala calcula una tasa de inflación de precios. La calcula en función de la variación del precio de un conjunto de bienes seleccionados, de los cuales algunos son bienes importados, como petróleo, maíz amarillo y trigo; y algunos son bienes no importados, como alimentos, productos lácteos, productos avícolas, pan, legumbres y hasta tubérculos.

Luis Enrique Pérez


El precio promedio pagado por esos productos durante un mes es comparado con el precio promedio pagado por esos mismos productos durante el mes anterior, y se calcula una inflación mensual. El precio promedio mensual de esos productos durante un año es comparado con el precio promedio mensual pagado por esos mismos productos durante el año anterior, y se calcula una inflación anual.
     En el cálculo de la inflación de precios, el Banco de Guatemala omite una distinción que es esencial. Es la distinción entre aumento particular y aumento general de precios. Por ejemplo, un aumento del precio de los combustibles derivados del petróleo, es particular porque es solamente aumento del precio de ese bien, aunque tal aumento pueda influir en el aumento de precio de otros bienes, como las tortillas de maíz, los adobes o la sal.  Por supuesto, si no disminuye la demanda de un bien cuyo precio ha aumentado, se reducirá la cantidad de dinero disponible para comprar bienes de otro género.
     Empero, puede haber un aumento general de precios, o aumento del precio de todos los bienes. Ese aumento ocurre si la cantidad de dinero se incrementa en una proporción mayor que la cantidad de dinero que demanda el mercado; pues tal incremento reduce el poder adquisitivo del dinero, de modo similar a como un incremento de la cantidad de frijol en el mercado, reduce el precio de ese grano. Evoco, al respecto, la teoría de la utilidad marginal decreciente de los bienes económicos.
     Adviértase que, en el caso de un aumento particular del precio de los bienes, el dinero pierde poder adquisitivo únicamente con respecto a los bienes cuyo precio ha aumentado; pero no con respecto a todos los bienes restantes; y en el caso del aumento general, el dinero pierde poder adquisitivo con respecto a todos los bienes. Estrictamente, “inflación” es el aumento general de los precios, provocado por un incremento de la cantidad de dinero. Y en nuestro país, el Banco de Guatemala es el agente primordial de incremento de la cantidad de dinero.
     Aunque el Banco de Guatemala le denominara “inflación” únicamente al aumento general de precios provocado por el incremento de la cantidad de dinero, es imposible calcular una tasa de inflación. Es imposible porque nadie puede cuantificar, por lo menos con suficiente precisión, la pérdida de poder adquisitivo del dinero provocada por un  incremento de la cantidad de dinero. Nadie puede cuantificarlo, por tres razones. Primera, la pérdida de poder adquisitivo del dinero no ocurre instantáneamente sino que se propaga gradualmente. Segunda, son impredecibles las reacciones que esa pérdida puede provocar en los agentes económicos. Tercera, no necesariamente hay una correlación entre proporción de incremento de la cantidad de dinero, y proporción de pérdida de poder adquisitivo del dinero.
     Post scriptum. La tasa de inflación que calcula el Banco de Guatemala es producto de una combinación absurda de aumento particular y de aumento general de precios. Esa tasa es una inútil invención extraída de arrogantes investigaciones, en las cuales la fantasía estadística abunda y la realidad económica escapa.