La Asamblea General de la ONU votó ayer de manera unánime para darle a Ban Ki-moon un segundo período como secretario general y lo elogió por fortalecer el rol de la organización internacional y su capacidad de visión en circunstancias difíciles.
NACIONES UNIDAS / Agencia AP
El organismo internacional de 192 miembros aplaudió al momento que adoptó la determinación de otorgar al diplomático sudcoreano de 67 años otro quinquenio al frente de la Asamblea de las Naciones Unidas.
El presidente de la asamblea Joseph Deiss azotó su martillo y proclamó la selección de Ban para un nuevo período que inicia a partir del 1 de enero.
Ban había anunciado este mes que buscaría un segundo período. No enfrentó oposición y su reelección había sido recomendada el viernes por el Consejo de Seguridad. Todos los grupos regionales de Naciones Unidas lo refrendaron y sus directivas se integraron al apoyo de la resolución de la Asamblea General.
Ban ha prometido seguir haciendo del organismo un «constructor de puentes» en una época de cambios globales.
El secretario general ha sido criticado por su falta de carisma y por no censurar los abusos a los derechos humanos en países poderosos como China y Rusia.
Pero se ha ganado elogios por su compromiso con el cambio climático, el desarme nuclear y la atención a los problemas de las mujeres, así como por su fuerte respaldo al movimiento pro democrático en el Norte de Africa y el Medio Oriente, y a la intervención militar en Costa de Marfil y Libia.
Nelson Messone, embajador de Gabón ante la ONU y actual presidente del Consejo de Seguridad —y quien presentó la resolución de la asamblea_, dijo que Ban ha trabajado «de manera sobresaliente y con total objetividad e independencia» en cada continente para promover la paz, la justicia y la seguridad internacional, «en ocasiones en circunstancias particularmente difíciles y duras».