Con el cambio de clima, San Isidro, Labrador, se las ha visto duras, en quitar el agua y poner el sol, para que, no se desluzcan las fiestas del último trimestre del año.  Entre ellas  los actos y fiestas de graduandos de colegios e institutos, donde los muchachos, han adquirido los títulos de Educación Media, que los acredita, como futuros alumnos universitarios. Ahora, el trasiego, de mudarse de niño a bachiller, obtenido con mucho o poco esfuerzo; quedará palidecido a la par de la adquisición del DPI. Eso aunado a los estereotipados estropicios, que ha sufrido la Usac, por un grupo de estudiantes, que manifestaron su inconformidad, hasta con el espejo, que devuelve su imagen, poco aceptable, y la mente confusa, que todavía, no tienen claro, para qué,  juego que se prestaron, donde solo fueron  cuerpos basiliscos, si ningún tipo de resultados, ni positivo, ni negativo, sino todo lo contrario; cayeron de inocentes, como tontos útiles, que fueron utilizados y después desechados;  quedando señalados y  marcados de por vida, por sus mismos compañeros;  mientras ellos, los bochincheros, se prestaban, para el juego político, que no les dio el final que los siniestros, manipuladores extranjeros esperaban; los buenos estudiantes, siguieron aprendiendo, no solo en aulas improvisadas, sino también aprendiendo de sus compañeros vainas, sí, correcto, son vainas, estos disconformes del orden establecido en la Usac, porque solo sirvieron de estuche, funda, para guardar, solapar, intereses funestos, en contra del saber, que a la hora de la hora, solitos, se inmolaron e inmortalizaron, como eso, bachilleres eternos, porque dudo que obtengan, ni un técnico, menos una licenciatura, medicina, ingeniero, arquitecto, vaya, nada de lo que se canta en la Chalana.