Al menos cuatro personas fallecieron al salirse de pista y deslizarse sobre una carretera el avión de la aerolínea TACA que intentó aterrizar en el aeropuerto de Tegucigalpa, informaron fuentes médicas y organismos de socorro a la agencia de noticias AFP.
El aparato, un Airbus A320-233 que llevaba 124 pasajeros a bordo más once tripulantes, cubría la línea Los íngeles-San Salvador-Tegucigalpa-San Pedro Sula.
Uno de los muertos es el presidente del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), el nicaragí¼ense Harry Brautigam, según fuentes médicas.
De acuerdo con los bomberos, el piloto también habría fallecido, aunque esta información no fue confirmada oficialmente.
Los equipos de socorro trataban de retirar de la cabina al copiloto, según medios locales.
La aeronave se salió de la pista atravesando un talud de unos 20 metros de profundidad para caer sobre una carretera, aplastando a varios automóviles en el trayecto.
El gerente de TACA, Armando Funes, no contaba con información sobre el número de víctimas pero admitió que «el avión está sumamente dañado» y que «los pasajeros están siendo llevados a los hospitales para hacerles una evaluación», según declaró a medios locales.
Funes indicó que el avión chocó contra un árbol tras deslizarse de la pista y acabó «partido en tres pedazos».
Entre los heridos, que han sido trasladados a hospitales de la capital hondureña, hay costarricenses, mexicanos y guatemaltecos, según información facilitada por algunos cónsules a medios locales. De los guatemaltecos, se tienen versiones no oficiales de dos heridos: Carmen Dighero y Alfonso Pimentel.
Según el ex ministro de Industria y Comercio hondureño Norman García, las malas condiciones de visibilidad podrían haber causado el accidente.
«Fue un aterrizaje difícil por la nubosidad que hay en Toncontin. El techo de nubes está bien bajo, el piloto intentó aterrizar por primera vez y tuvo que alzar vuelo», dijo García, quien viajaba en el avión accidentado.
«En el segundo intento (de aterrizaje), vi que las llantas del avión tocaron la pista frente a la terminal, y era una señal de que se había comido la pista», añadió García.
El aeropuerto de Toncontin de la capital hondureña, rodeada de montañas, es uno de los más peligrosos del continente, según los especialistas en aeronáutica.
Este es el octavo accidente que registra la aerolínea salvadoreña desde 1959, aunque hasta hoy, sólo en ese año en un accidente en Managua, y en 1998 en Estados Unidos se habían registrado víctimas mortales.
Esfuerzos
De acuerdo con el coronel Carlos Cordero, comandante en jefe de los Bomberos de Honduras, se han iniciado las maniobras para el rescate de personas, así como la remoción de las partes del avión, para poder liberar al menos cuatro automóviles que habían quedado debajo de la aeronave.
Por parte de la compañía TACA, sede Guatemala, se informó que el accidente se reportó a las 9:45 horas de Centroamérica. Al momento, de los 124 pasajeros abordo todos han sido evacuados de la aeronave y recibieron atención medica según la necesidad.
Según el comunicado de TACA, la tripulación consistía de dos pilotos y cuatro tripulantes de cabina; adicionalmente, viajaban cinco tripulantes para reposicionamiento. Los pilotos han sido los últimos en ser evacuados y se encuentran en este momento en proceso de confirmar su estatus.
Se están ejecutando todos los procedimientos de emergencia y proveyendo todos los recursos necesarios para atender la situación, dando énfasis a la atención de todas las personas, en coordinación con las autoridades, refiere la compañía aérea.
TACA mantendrá un proceso informativo permanente, para dar a conocer en forma ordenada el estado de las diferentes situaciones que se producen en un caso como el presente. También se puede consultar la página http://news.taca.com.