Apenas a finales del año pasado los estadounidenses estaban sintiéndose mejor acerca de su situación financiera personal. Ahora están comenzando a preocuparse más sobre cómo van a pagar sus deudas, en momentos en que sienten tambalearse las finanzas del país.
Con el Congreso estancado en las gestiones para lidiar con la deuda nacional, la deuda hogareña está causándole estrés a casi la mitad del país, de acuerdo con un nuevo sondeo de Associated Press-GfK. Uno de cada cinco adultos dijeron estar preocupados sobre sus deudas todo o casi todo el tiempo. Si compraron algo con una tarjeta de crédito el mes pasado, más de un tercio dicen que no van a pagarlo cuando les llegue la cuenta.
Las crecientes preocupaciones representan una viraje respecto al sondeo del otoño pasado, que encontró una creciente confianza sobre las finanzas. El estrés relacionado con deudas ha subido 17% desde la encuesta de noviembre, elevando esos temores al nivel de 2009 e inicios de 2010.
«No es que la deuda sea enorme. Simplemente es difícil de pagar mes tras mes», dijo Theresa Telford, una asistente de maestra de 45 años que vive con su esposo, un vicealguacil, y sus cuatro hijos. «Parece que todo está subiendo de precio, pero los salarios no están subiendo».
Aunque la recesión oficialmente concluyó en junio de 2009, los estadounidenses muestran poca confianza en una recuperación lastrada por el persistente desempleo, el lento crecimiento económico, los altos precios de los alimentos y las disputas políticas sobre cómo atajar la abultada deuda nacional. La confianza del consumidor cayó en junio a su nivel más bajo en siete meses.
El sondeo encontró que los hogares con ingresos de más de 75 mil dólares anuales tuvieron el mayor incremento en el estrés relacionado con sus deudas desde noviembre. Pero los niveles de estrés más altos siguen siendo los de los grupos más vulnerables: hogares con desempleo, personas con ingresos familiares de menos de 20 mil dólares, padres solteros, y adultos sin enseñanza secundaria.
En total, más de 40 millones de estadounidenses están sintiendo estrés a causa del dinero que deben, ya sea en tarjetas de crédito, hipotecas, préstamos automovilísticos u otros, indica el sondeo.
Aunque subió, el Indice de Estrés por Deuda basado en la encuesta se ubicó en 29,2, aun dentro del rango considerado moderadamente bajo.
La encuesta la realizó GfK Roper Public Affairs and Corporate Communications del 16 al 20 de junio por teléfono a 1.001 adultos, 715 de los cuales tenían tarjeta de crédito. El margen de error es de más/menos 4,1 puntos porcentuales.