Augusto César Sandino, un héroe


í“scar Enrique Alvarado S., A-1 355265

Inició su lucha en 1926, cuando denunció la intervención de tropas norteamericanas en Nicaragua. Poseedor de una voluntad firme, soportó los mayores peligros al frente de sus soldados en la cordillera de las Segovias. De origen muy humilde, se ganó la vida trabajando como obrero en diferentes empresas, una de ellas la United Fruit Company, Quiriguá, Guatemala.

La lucha armada la inició en las ciudades de San Rafael del Norte, Jinotega y Ocotal. Aunque las presiones para que dejara las armas fueron fuertes, comunicó su deseo de resistir en tanto continuaran los marines en su paí­s. Infatigable, organizó un ejército a base de empeño y casi sin recursos.

Fue asesinado el 21 de febrero de 1934. Ya sin su presencia la guardia nacional atacó sus colonias en Wiwili, falleciendo muchos sandinistas. Somoza aceptó su responsabilidad en este crimen, tal como él mismo lo dijo en Granada.

Sandino nunca traicionó su causa, a pesar de que las tentaciones fueron muchas y lucrativas, por aceptar la paz le ofrecí­an elevadas sumas. No atentó en contra del honor militar, pues trataba humanamente a los prisioneros de guerra. Creó una república en las Segovias y le dio libertad. Sandino fue seguidor de Bolí­var.

Ocupó el cargo de Jefe Supremo del Ejército Defensor de la Soberaní­a Nacional de Nicaragua, con él enfrentó a los marines en numerosas batallas. El Ejército norteamericano ocupó las poblaciones de Bluefields, Puerto Cabezas, Prinzapolca y Rí­o Grande en la costa atlántica.

La vida de Sandino es ejemplar, buen ciudadano, trabajador, de costumbres austeras, no tomaba licor. Fue un caudillo que a la par de los campesinos trabajaba la tierra, de las cooperativas salí­an productos que eran vendidos en diferentes regiones del paí­s y en el extranjero.

Sandino siempre demostró claridad en sus ideas polí­ticas y sociales, fue un antiimperialista, nacionalista. Aplicó la justicia sin distinción de clases sociales. Cultivó el género epistolar, mantuvo correspondencia con personalidades, redactaba los partes de guerra y enviaba las noticias a la prensa.

El Gobierno libre de Nicaragua, del cual fue su representante, estuvo formado por los departamentos de Nueva Segovia, Estelí­, Jinotega, Matagalpa, parte de León, Chinandega y Chontales. Más de la mitad del territorio nacional. En 1932 fue el año de mayor actividad militar.

Sandino decidió intervenir en polí­tica cuando el presidente Juan Bautista Sacasa ejerció el gobierno en Puerto Cabezas, apoyado por el general Moncada, jefe del Ejército Constitucionalista. Moncada llegó a un acuerdo con los norteamericanos y ocupó la presidencia. Sacasa salió hacia los Estados Unidos, regresó y ocupó la presidencia en 1933, firmando la paz con Sandino. No pudo castigar a los culpables del asesinato del héroe. Finalmente Sacasa fue derrocado por Somoza ?jefe de la Guardia Nacional? en 1936.

Toda su correspondencia terminaba con el lema: Patria y Libertad. Intentó la unidad de obreros y campesinos. Logró ver culminado su sueño y lucha, pues los marines norteamericanos abandonaron Nicaragua en 1932. Para ser un fiel seguidor de Sandino es necesario vivir modestamente tal como el héroe pasó su vida trabajando de obrero.