La resaca que sufre el Athletic de Bilbao luego de eliminar al Manchester United pone en riesgo sus esperanzas de ganar la Liga Europa, mientras prepara su visita mañana al Schalke en el partido de ida por los cuartos de final.
El Athletic se ganó elogios y comparaciones con el poderoso Barcelona luego de mostrar un fútbol cautivador en los dos partidos de la serie en la que eliminó a Man U, pero no ha ganado ninguno de sus cuatro partidos de la liga española desde entonces.
El Schalke, campeón del torneo en 1997 y en buena forma en la Bundesliga, buscará sacarle jugo a la situación en uno de dos cuartos de final que se disputan equipos españoles y alemanes.
«Son una muy buena escuadra, y cuando empieza a lanzar su ataque, es difícil para cualquier equipo detener al Bilbao», dijo Sergio Escudero, uno de tres españoles que juegan en el Schalke.
«Pero creo que tenemos una buena oportunidad de llegar a semifinales».
Con el United y Manchester City eliminados sorpresivamente en octavos de final, la competencia de segundo nivel entre clubes europeos parece abierta para cualquiera este año.
El Atlético de Madrid, campeón de 2010, recibe al Hannover en el juego de ida de su llave, mientras que el Valencia, el tercer equipo español que avanzó a cuartos, viaja a Holanda para medirse con el AZ Alkmaar.
La recompensa para el Sporting de Lisboa por eliminar al City es jugarse la clasificación a semifinales contra el Metalist Kharkiv, posiblemente el equipo más débil de los ocho restantes.
La fatiga parece haber afectado al Athletic, uno de los equipos con la agenda más saturada en Europa, y la debilidad de su banca ha quedado expuesta, justo cuando parecía que tenía al alcance un pase a la Liga de Campeones si termina dentro de los primeros cuatro puestos de la liga española.
El delantero Fernando Llorente no parece haberse recuperado por completo de la lesión en la pierna izquierda que sufrió en el partido de vuelta contra el United, mientras que el volante David López está en duda luego de lastimarse el tobillo derecho el lunes durante un entrenamiento.
«Si jugamos como sabemos jugar, tenemos una oportunidad de obtener un buen resultado y, después, de regreso en el San Mamés, conseguir la clasificación», dijo el mediocampista Markel Susaeta.
El Athletic está en cuartos de final por primera vez desde 1977, cuando llegó hasta la final, la cual perdió ante la Juventus por goles de visitante como criterio de desempate.
El Schalke, que venció al Twente en la ronda de octavos, se ubica en el tercer lugar de la Bundesliga luego de hilar tres triunfos, y cuenta con un poder ofensivo que incluye al holandés Klaas-Jan Huntelaar —el máximo anotador de la Liga Europa con nueve goles— y al ex delantero de la selección española y del Real Madrid, Raúl González.
«Raúl ya nos ha dicho un par de cosas sobre el Bilbao. Por eso sabemos que nos espera una labor difícil», dijo el defensa del Schalke Christian Fuchs.
El Atlético tiene de nuevo los pies en la tierra luego de su luna de miel con el entrenador Diego Simeone, al perder dos de tres encuentros en casa después de haber registrado sólo una derrota en los primeros 10 partidos bajo la batuta del argentino.
Aun así, los campeones de 2010 han ganado sus cuatro partidos de competencias europeas con Simeone y el mediocampista Thiago se ha recuperado de una lesión muscular en la pierna. También es posible que el volante brasileño Diego esté de vuelta para el encuentro contra el Hannover tras recuperarse de una lesión en el muslo derecho.
El Hannover, que se sitúa a media tabla en la Bundesliga, es el equipo menos experimentado de los cuartos de final. Su única participación previa en torneos europeos fue en la extinta Recopa.
Dos derrotas consecutivas en la liga española le han puesto presión al técnico del Valencia Unai Emery y su futuro parece incierto previo a su viaje a Alkmaar.
«El equipo no está en gran forma», dijo el volante David Albelda. «Pero la situación no es tan crítica como a ustedes les gustaría hacerla parecer. Hemos estado en situaciones mucho peores».
El Valencia venció a otro equipo holandés, el PSV Eindhoven, en ronda de octavos.