Es cobarde, artero e inaudito el ataque a balazos contra Yuri Melini. Las fuerzas demoníacas se han posesionado absolutamente de Guatemala. Las personas decentes no pueden ya vivir o trabajar en paz. La muerte ronda por doquier; en cualquier esquina; en cualquier calle; en cualquier sitio.
Como ambientalista y como ciudadano de Guatemala condeno con todo estupor y con toda mi fuerza el atentado contra el ambientalista Yuri Melini, director de CALAS. Como Presidente de la Asociación Ambientalista ARBOLES, exijo terminantemente al gobierno del presidente ílvaro Colom y a sus entes investigativos, el inmediato esclarecimiento de la agresión a balazos sufrida por el doctor Melini y, que los frustrados asesinos físicos e intelectuales sean capturados y llevados ante los tribunales de justicia, aunque fueran amigos y/o financistas del presidente Colom o, de los presidentes anteriores.
Debe investigarse a los conocidos depredadores de Guatemala, sectores criminales que al amparo de capitales de dudosa procedencia y con apoyo de algunas autoridades gubernamentales que «legalizan» sus actividades, tradicionalmente rasgan y venden amoralmente, por pedazos, al país y sus recursos naturales.
Presento a los familiares y amigos de Yuri mi más profunda consternación por el atentado, con la plena seguridad de que Yuri saldrá muy bien del lance.